PALMA DEL RÍO 26

ANAITASUNA 29

Tras caer hace una semana en Valladolid ante uno de los rivales ubicados en la parte baja de la tabla, esta vez no desaprovechó Anaitasuna su visita a la cancha del colista, al que dominó de principio a fin para hacerse con los puntos. El rendimiento de una escuadra y otra fue más desequilibrado de lo que reflejó el marcador final.

La escuadra navarra, liderada por un Pepe Novelle que necesitaba un encuentro tan acertado en ataque, ya marcó diferencias para cuando se llevaban disputados los diez primeros minutos (4-8) de encuentro. Sin embargo, llegó la reacción de los anfitriones, a los que les cuesta meterse en los partidos, hasta ponerse con un amenazante 7-8.

Fue ahí cuando apareció otro de los protagonistas del choque, el serbio Nadoveza, para con su lanzamiento exterior abrir una brecha considerable antes de retirarse a vestuarios (11-17). El triunfo estaba bien encauzado, pero el Palma del Río iba a vender cara su derrota.

No en vano, se puso manos a la obra para intentar una remontada que le era muy necesaria, pero Anaitasuna no se dejó sorprender y, aunque los locales llegaron a ponerse 17-20, un nuevo arreón amplió la diferencia otra vez a seis goles.

La escuadra cordobesa no cejó en su empeño, pese a ello, y se colocó a dos dianas (26-28), pero ya en el tramo final del envite y sin tiempo material para dar un susto a los blanquiverdes, que se meten de lleno en la pelea por el séptimo puesto.