El Bayern Múnich logró una cómoda e importante victoria en casa ante el Juventus, por lo que los bávaros partirán con ventaja en el choque de vuelta. Los italianos no supieron reaccionar al tempranero gol de Alaba antes de cumplirse el primer minuto de juego, y el segundo de Müller sentenció a los transalpinos.

Y eso que Jupp Heinckes sorprendió dejando en el banquillo al holandés Robben. Lo cierto es que no le salió nada mal la jugada, porque fue a los 26 segundos cuando el lateral Alaba anotaba el primer gol. El guardameta Buffon no pudo detener el potente disparo del austríaco después de que el balón golpease en un defensa del Juventus.

No pasó mucho tiempo más Robben en el banquillo, ya que tuvo que entrar en el minuto 15 sustituyendo al lesionado Kroos. Y fue el holandés quien tuvo las mejores ocasiones de la primera parte. En el primer intento fue Buffon quien atajó su lanzamiento, mientras que en el segundo su disparo raso se fue fuera muy cerca de la portería.

En la segunda parte, el Bayern echó el freno en su juego. Sabedor de que el resultado era bueno, los bávaros no querían cometer ningún tipo de error. Sin embargo, su potencial ofensivo apareció una vez más para dejar casi sentenciada la eliminatoria.

En una jugada en la que Mandzukic podía estar en fuera de juego, Müller marcaba el segundo gol del encuentro al anotar a puerta vacía después de un pase a placer del delantero.

Antonio Conte movió fichas y pareció que el Juventus reaccionaba, pero el Bayern, muy sólido, no se dejó sorprender. El colegiado incluso perdonó la expulsión a Franck Ribery por una dura entrada a Vidal en el 84, pero el encuentro no cambió de ahí hasta el pitido final.