El director de la Ertzaintza achaca la muerte de Cabacas a un «accidente»
Hoy se cumple un año de la carga de la Ertzaintza en el callejón de María Díaz de Haro en el que, como miles de aficionados del Athletic, Iñigo Cabacas celebraba la victoria de su equipo. El director de la Ertzaintza, Gervasio Gabirondo, insiste en que fue «un accidente».
GARA |
Gervasio Gabirondo ha accedido al cargo de director de la Ertzaintza tras el relevo en el Gobierno de Lakua que se ha dado durante el año transcurrido desde que Iñigo Cabacas resultara herido mortalmente por una pelota de goma disparada por la Ertzaintza en un callejón del barrio bilbaino de Indautxu.
GARA informó el pasado lunes de que, según consta en la investigación judicial que se está llevando a cabo, una secuencia aportada desde el seno de la propia Policía autonómica constata que en la zona de María Díaz de Haro no se estaba produciendo ningún incidente cuando se produjo la carga que, a la postre, acabó con la vida del joven aficionado del Athletic.
Según esa reconstrucción de los hechos, fue el mando que dirigía la operación desde la comisaría de Deustua quien dio la orden de disparar pese a que los agentes desplazados al lugar insistieron en que reinaba la tranquilidad en un ambiente marcado por la celebración de la victoria del conjunto rojiblanco frente al Schlake 04.
Opiniones enfrentadas
Nombrado por Iñigo Urkullu para dirigir a la Policía autonómica, Gabirondo, que fue integrante de la primera promoción de la Ertzaintza, mantiene la tesis enarbolada por el Ejecutivo de Patxi López -especialmente por quien entonces era consejero de Interior, Rodolfo Ares- y ayer calificó de «accidente» la muerte de Cabacas a causa del impacto de una bola de goma.
Muy distinta es la opinión de la familia. En declaraciones a ETB, Fina Liceranzu indicó que su hijo «fue una diana», resaltando que «estaba de espaldas a ellos», en referencia a los ertzainas apostados en el callejón. El padre, Manuel Cabacas, comentó que lo que estaba sucediendo allí tras el partido «era una fiesta, no era una manifestación, no era una kale borroka, no era una asamblea, era una fiesta y no pueden llegar (los ertzainas) como llegaron; eso no lo pueden cambiar».
En declaraciones a la Cadena Ser recogidas por Europa Press, Gabirondo ofreció esta opinión: «Ha habido un accidente, porque creo que tenemos que calificarlo como tal; ha sido un accidente, porque nadie tenía voluntad de crear el daño que se ha creado». Al ser preguntado sobre cómo se desarrollaron los acontecimientos, el responsable de la Policía autonómica se limitó a comentar que, anteriormente, existían procedimientos y un equipamiento determinado pero que, precisamente a consecuencia de «las circunstancias que concurrieron en este caso», se vio que «no todo lo que pensábamos que funcionaba bien, ha funcionado».
No obstante, comentó que, tras lo ocurrido hace un año, se ha observado que «quizá es bueno ver otras formas de hacer las cosas. «En treinta años nos han podido valer pero se ha visto que no era lo adecuado -añadió-, que en el mercado ha habido nuevos materiales, nuevos equipamientos, que pueden servir más al día de hoy y es lo que se ha hecho, incorporar esos equipamientos y actualizar procedimientos».
Al margen de esas consideraciones de tipo técnico, continúan difundiéndose valoraciones muy críticas con la actuación de la Ertzaintza y del Gobierno de Patxi López en torno a este caso. A esas voces se sumó ayer la de Ezker Anitza-IU, que considera «lamentable la falta de asunción de responsabilidades políticas y policiales» cuando se cumple un año de la muerte de Cabacas.
Iñigo Martínez, portavoz de la Presidencia de Ezker Anitza, recordó que en su día esta formación política reclamó al Departamento de Interior «una investigación rápida, transparente e independiente que a fecha de hoy no se ha realizado».