El Caja Laboral Baskonia pierde el primer partido de cuartos de final de la Euroliga
Bandeja de plata para el CSKA
Los baskonistas encajaron 50 puntos en la primera mitad y llegaron a ir 22 puntos abajo. San Emeterio acabó con un golpe en el codo.
CSK MOSCÚ 89
CAJA LABORAL BASKONIA 78
Arnaitz GORRITI
Caja Laboral Baskonia le puso la victoria en bandeja de plata al CSKA de Moscú en el primer partido del cruce de cuartos de la Euroliga. Los gasteiztarras solo ofrecieron resistencia a través de Causeur, Nocioni y un poco de Milko Bjelica. El resto del plantel, sobre todo unos Nemanja Bjelica y Maciej Lampe otra vez desesperantes, naufragaron, y San Emeterio debió abandonar el partido en el último cuarto debido a un golpe en el codo izquierdo.
La derrota se gestó en los 20 primeros minutos. Milos Teodosic puede estar agradecido a los bases gasteiztarras, ya que estos le pusieron la alfombra roja. El base serbio tiró de lejos, penetró y repartió juego ante unos Cook y Heurtel superados por completo. De la mano de Teodosic y Papaloukas -Aaron Jackson no tuvo su día y Messina lo sentó-, jugadores como Erceg, Krstic y Kaun lograron posiciones comodísimas para tirar bajo canasta. Las penetraciones de los bases por el centro de la zona fueron una constante, y si había algún fallo en el tiro, los rebotes también eran locales.
La defensa moscovita se fue ajustando hacia el segundo cuarto, y ya para el descanso los de Tabak caían por 50-33.
Una goma algo inútil
Si el Baskonia albergaba aún esperanzas de voltear el marcador, Weems, con dos triples nada más empezar el tercer período, se encargó de enterrarlas. A partir de ahí, los rusos se limitaron a llevar un ritmo sin altibajos, con gente como Micov bastándose para contener a la escuadra gasteiztarra.
Nocioni -que sumó mil puntos en la Euroliga- y Causeur le echaron algo de orgullo en los últimos minutos, llegando a rebajar la desventaja de la veintena a la barrera de los diez puntos. Sin embargo, por un lado era tarde, y por el otro el CSKA de Moscú tenía un par de marchas más para meter y abrir brecha sin aparente dificultad.
Con el golpe de San Emeterio, el Baskonia se quedaba sin uno de sus referentes, por mucho que hubiera jugado un mal partido. Fue entonces, con todo perdido, cuando a Lampe y a Nemanja Bjelica les dio por meter algún tiro, como un alley oop del serbio a pase de Heurtel. Mal asunto cuando perder de 11 es un buen resultado.
Naturalmente, Zan Tabak no estaba contento con lo visto en el Universal Sports Hall. El técnico croata lamentó ante todo el «exceso de respeto» mostrado por sus jugadores y los 50 puntos encajados en la primera mitad.
«Jugamos con demasiado respeto, demasiado frenados. No era algo que tuviéramos preparado, pero es que a veces las emociones son difíciles de controlar», reconocía el preparador baskonista.
«No podemos hablar de que no nos entraron muchos tiros, pero sí de que nos metieron 50 puntos en los dos primeros cuartos, de nuestra escasa presencia física por un exceso de respeto. Porque aunque ellos teóricamente sean superiores, el baloncesto ha demostrado mil veces que eso no significa nada. Recuerdo que muchos de nuestros jugadores nunca han llegado a una ronda de cuartos de la Euroliga, así que espero que esto les sirva para aprender de cara al segundo partido», concluyó.
Mientras, Maciej Lampe añadía que «estamos muy decepcionados y sorprendidos por los errores que cometimos en defensa. Debemos jugar mejor». A. G.
Con 26 puntos, Georgios Printezis lideró el triunfo de Olympiacos por 67-62 ante el Anadolu Efes. Los helenos se aprovecharon del horrible día turco en el triple -1 acierto de 19 intentos- para llevarse un encuentro discurrido con escasas ventajas. Gonlum, con 17 tantos, fue el mejor de los otomanos.
El Real Madrid sumó su primera victoria en el cruce de cuartos tras superar por 79-53 al Maccabi de Tel Aviv. Los israelíes se las prometían muy felices con un 14-23 favorable al final del primer cuarto, pero el cuadro dirigido por Pablo Laso le dio la vuelta al marcador con un parcial de 24-4. A partir de ahí, Sergio Rodríguez dio un recital con 10 asistencias y Rudy sumó 15 tantos.
