Peter Sagan (Cannondale) se adjudicó ayer la victoria en la Flecha Brabanzona al ganar en un duelo de gigantes al campeón mundial Philippe Gilbert (BMC), a quien superó al sprint a escasos metros de la llegada. El valón, quien atacó a 400 metros de la pancarta de meta, cedió ante el empuje de este eslovaco de 23 años, que hizo valer su punta de velocidad para alzar los brazos por octava vez en lo que va de temporada.

El ciclista del Cannondale -vencedor en marzo de la Gante Wevelgen y segundo en la Vuelta a Flandes y la Milán-San Remo- cumplió pronósticos. Estuvo en la selección final de candidatos y firmó el triunfo tras cubrir los 200 kilómetros de recorrido entre Lovaina y Overijse en un tiempo de 4h.45.06.

Gilbert trató de sorprender con su maillot arco iris, pero le faltó el toque de fuerza final que sí pudo lucir su rival. La tercera plaza fue para el flamenco Bjorn Leukemans (Vacansoleil), quien jugó sus bazas sin suerte desde lejos.

Antes de tomar la salida, Sagan regaló un ramo de flores a la azafata a la que tocó el trasero en el podio del Tour de Flandes. Maya Leye aceptó el regalo.

La jornada estuvo marcada por la escapada de seis corredores que abrieron carrera desde el kilómetro 46: Kenny DeHaes (Lotto), Nikolas Maes (Omega Pharma), Ben Hermans (RadioShack), Youcef Reguigui (MTN Qhubeka), Jane Ghyselinck (Cofidis) y Philip Deignan (Healthcare).

El entendimiento no fue obstáculo para los fugados, que trataron de sumar fuerzas para llegar a meta, pero el pelotón los mantuvo a raya en todo momento, sobre todo el Cannondale de Sagan, encargado de anular cualquier opción que pusiera en peligro la victoria de su jefe de filas.

Al final se formó un grupo de 11 corredores en cabeza, con los favoritos atentos. Ya no hubo opción para el pelotón, que rodaba dividido. Sylvain Chavanel (Omega) se incrustó entre los grandes, pero sabedor de que sus enemigos eran más rápidos al sprint ensayó de lejos.

Gilbert quemó las naves después de su compañero Van Avermaet, justo antes de entrar en la recta de meta, pero se le pegó Sagan y esa fue su perdición. El eslovaco no desperdició la ocasión a cuatro días de la Amstel Gold Race, su primer gran objetivo de la temporada.

«La Lieja-Bastoña-Lieja -dentro de diez días- será muy dura para mí, pero espero aprovechar mi excelente condición para conseguir algo este domingo en la Amstel Gold Race», declaró el corredor eslovaco, que sucede en el palmarés al francés Thomas Voeckler y hoy tomará la salida en el Gran Premio de Denain galo.

Gilbert, uno de los grandes favoritos en las próximas clásicas, también ganó confianza con su buena actuación, después de un inicio de temporada complicado por problemas físicos.