La revuelta bahreiní trata de superar la censura con motivo de la Fórmula I
GARA | MANAMA
La oposición de Bahrein, país de mayoría chií dominada por una dinastía suní, salió ayer masivamente a la calle coincidiendo con los entrenamientos del Gran Premio de Fórmula 1 en la capital, Manama.
El Colectivo 14 de Febrero, que debe su nombre al inicio de la revuelta que al calor de la Primavera Árabe estalló hace dos años, llamó a una Jornada de la Ira contra la «Fórmula de Sangre», en referencia a la prueba automovilística.
Grupos de jóvenes protestaron sin cerrar el acceso al circuito de Sajir, al sur de Manama. La oposicón tolerada liderada por el movimiento chií al-Wefaq, llamó a una manifestación en la autopista de Budaya, situada cuatro kilómetros al oeste de Manama y que cruza muchas aldeas chiíes.
Silencio de los organizadores
HRW ha denunciado el silencio de los organizadores de la prueba ante el sufrimiento y la represión contra la población.
La prueba fue suspendida en 2011 en medio de la inestabilidad política. En 2012, la represión contra las protestas por la prueba dejó un muerto.