Los sindicatos denuncian el poder de las mutuas en la salud laboral
La celebración mañana del Día Internacional de la Seguridad y la Salud en el Trabajo es el contexto en el que las centrales sindicales denunciaron el poder cada vez mayor que se está dando a las mutuas con las reformas aprobadas por el Gobierno español. Consideran que la capacidad de decisión cada vez mayor de estas entidades va en detrimento del sistema público de salud y, en protesta por ello, convocaron movilizaciones en Hego Euskal Herria.
I.T |
Distintos puntos de Hego Euskal Herria vivieron ayer movilizaciones convocadas, en su mayor parte, por LAB, aunque también por UGT y CCOO, con motivo de la celebración del Día Internacional de la Seguridad y la Salud en el Trabajo. El objetivo fue la denuncia del papel preponderante de las mutuas en la saluda laboral en detrimento del sistema público de salud. Mutualia, Asepeyo, Fremap, Mutua Navarra y La Universal fueron algunas de la directamente mencionadas. LAB convocó 17 actos de protesta repartidos por el sur de Euskal Herria bajo el lema «Mutuas, esclavas del capital. Decidamos nuestro modelo sanitario». Uno de los más concurridos fue el de Iruñea, en el que los participantes fueron en manifestación desde el Hospital de Nafarroa hasta la Mutua La Universal. En Gasteiz, una cadena humana partió desde el Instituto Nacional de la Seguridad Social y en Azpeitia escenificaron una parodia delante de Asepeyo.
En Donostia, tras celebrar los delegados del sindicato una mesa redonda sobre las mutuas, realizaron una concentración en la que el secretario de Salud Laboral, Ibon Zubiela, denunció que las condiciones de empleo de los trabajadores «siguen empeorando, con factores como las reformas de pensiones o del mercado de trabajo, y la casi desaparición de la negociación colectiva, que tienen incidencia directa en la precariedad, que afecta a la salud y la seguridad de los trabajadores».
En su opinión, se ha pasado del absentismo «al presentismo porque se obliga a acudir al puesto de trabajo aunque no se esté en condiciones para ello sin garantizar los derechos elementales». Zubiela insistió en que la precariedad «tiene incidencia directa sobre el aumento de las enfermedades profesionales, aunque las mutuas no reconocen muchos de esos accidentes como de origen laboral».
Lamentó que estas entidades «juegan el papel de negar el origen laboral de las patologías» y puntualizó que son «asociaciones de empresarios, teóricamente sin ánimo de lucro que, a corto y medio plazo, buscan la mejora de resultados económicos tanto de ellas como de las empresas asociadas».
El dirigente de LAB criticó que, para lograr sus objetivos, las mutuas «aplican terapias de choque como infiltraciones, altas tempranas, altas económicas, niegan el origen de los riesgos laborales durante periodos de embarazo y de lactancia natural y, por lo tanto, desvían muchas patologías a la Seguridad Social para que las pague la sociedad en su conjunto».
Ibon Zubiela informó también de que «en los nuevos borradores de competencias para las mutuas figura que, en contingencias comunes, puedan dar prácticamente el alta. Van a tener capacidad de proponer el alta a los centros de atención primarira del sistema público, de tal forma que si en el plazo de cuatro días no contestan, ese alta se hará efectiva».
UGT y CCOO
Por su parte, el secretario general de UGT-Euskadi, Dámaso Casado, reclamó a la patronal Confebask -ante cuya sede en Bilbo se concentraron delegados de este sindicato- que inste a los empresarios a que no despidan a los trabajadores que se ven obligados a coger una baja laboral por razones de salud.
En Nafarroa, UGT celebró una concentración ante la sede del Instituto Nacional de la Seguridad Social, donde desplegaron una pancarta con el lema "Accidentes laborales, basta ya!". En esta movilización, en la que participó entre otros el secretario general en Nafarroa, Juan Goyén, se leyó un manifiesto en el que se afirma que medidas como la retirada de mejoras de los convenios en materia de incapacidad temporal o la cesión del control de la misma a las mutuas, «unido al miedo a perder el empleo» hacen que los trabajadores acudan a su puesto de trabajo «sin haberse recuperado de su enfermedad, con las consiguientes consecuencias para su salud individual y para la salud pública».
Entretanto, CCOO de Nafarroa, también se movilizó frente a la patronal, en este caso, la Confederación de Empresarios de Navarra (CEN) en Iruñea, donde un grupo de delegados de la central, encabezados por su secretario general, Raúl Villar, portaban una pancarta con el lema "Enfermedades profesionales. Reconocimiento ya!".
En esta concentración, la secretaria de Salud Laboral y Medio Ambiente de CCOO-Navarra, Carmen Sesma, manifestó que el de ayer era un día de recuerdo a todas las víctimas y a todos los trabajadores que han sufrido las consecuencias de unas malas condiciones de trabajo, pero también era «un día de acción para reivindicar a las empresas y a los poderes públicos mejoras en la prevención de riesgos laborales».
Ibon Zubiela, de LAB, denunció que «para lograr sus objetivos, las mutuas aplican terapias de choque como infiltraciones, altas tempranas, altas económicas, negar el origen de los riesgos laborales durante periodos de embarazo y de lactancia natural».
El Observatorio Vasco de la Juventud afirmó que en 2012 se produjeron en la CAV 8.923 accidentes laborales, lo que supone un descenso del 15% respecto a 2011, y que el descenso entre la población de 16 a 34 años fue del 25%. El aumento del paro justifica en buena parte estas bajadas.
Dámado Casado, secretario general de UGT-Euskadi, afirmó que en las reuniones que ha mantenido con Confebask ha solicitado a la patronal que «convenza a los empresarios para que no despidan a los trabajadores por estar de baja».
El sindicato de enfermería Satse reclama al Gobierno español que adapte la normativa a la directiva europea sobre lesiones por pinchazos y cortes en el trabajo, uno de los mayores riesgos para la salud de estos profesionales por la posible transmisión de enfermedades.