El Gobierno turco destacó que el proceso de paz con el PKK ha alcanzado un punto «muy importante» con el anuncio del repliegue de guerrilleros a partir del 8 de mayo, y el viceprimer ministro, Bulent Arinç, sugirió que no impedirá esta operación al afirmar que «nuestras fuerzas de seguridad llevarán sus misiones con gran cuidado y gran atención».

Arinç pidió a todas las partes actuar de forma sensata para concluir con éxito y «evitar comportamientos y acciones que puedan sabotear el proceso». El ministro criticó a quienes quieren «manchar» al Gobierno aprovechándose de sus negociaciones con el PKK, en alusión a la principal formación nacionalista, el MHP, que ha reiterado su oposición a cualquier acuerdo con la guerrilla.