El Ibex logró asentarse sobre los 8.400 puntos gracias a una reacción positiva en el último tramo de la jornada. Aún así, se dejó un 0,15%, y hoy saldrá desde los 8.406,40 puntos. En Europa, los índices principales sí tuvieron tiempo para pasarse al verde. Londres (+0,76%) y Fráncfort (+0,61%) se anotaban un avance significativo, mientras que París (+0,05%) superaba levemente el nivel de salida. Las bolsas necesitaron de esa respuesta vespertina ante la desazón provocada por las palabras del presidente del BCE, Mario Draghi, tras anunciar la rebaja de los tipos de interés hasta el 0,5%, el precio más bajo de su historia. Además, anticipó la decisión de prolongar hasta julio del próximo año la barra libre de liquidez y la intención de adoptar medidas para impulsar el crédito a las empresas. Y fue, precisamente, la falta de concreción de las medidas de apoyo financiero al tejido empresarial la causante del fuerte desplome de todos los mercados europeos. La prima de riesgo, por otro lado, seguía su camino descendente hasta perforar a la baja los 290 puntos. En el Ibex, se destacó Inditex (-1,42%). La compañía de Amancio Ortega distribuyó un dividendo de 1,10 euros. De este modo, el máximo accionista -posee cerca del 60% del capital-ha ingresado 406 millones de euros por el dividendo, que se elevarán hasta los 813 millones de euros cuando se entregue en noviembre el segundo, de idéntica cantidad. Los más bajistas fueron Sacyr (-3,04%), Acciona (-2,15%) y Popular (-2,03%). En París, sobresalió Cap Gemini (+7,66%) después de anunciar que mantiene sus objetivos de beneficio.