LAGUN ARO GBC Crónica de un descenso anunciado
Con el descenso certificado, a buscar otras soluciones
Gipuzkoa Basket peleó pese a sus limitaciones físicas, pero definieron el poco tino y los tiros libres locales.
GRAN CANARIA 66
LAGUN ARO GBC 59
Arnaitz GORRITI
No es que estuviese cantado, pero casi. Lagun Aro GBC ha perdido matemáticamente su condición de equipo de Liga ACB a falta de dos jornadas. Pese a la derrota del Fuenlabrada en La Laguna ante el CB Canarias, los donostiarras caían bien cerca de ahí, en la cancha del Gran Canaria, impidiendo cualquier clase de remontada.
Sin embargo, aún hay mucha tela que cortar. Ya el propio Sito Alonso declaraba tras el partido que «Gipuzkoa Basket es ejemplar en muchas cosas, como es en lo de moverse ante malas situaciones. Además, este club tiene en disposición algo que no tienen todos: que regularmente, en pagos y demás, funciona. En eso sí que no hemos descendido». Hay que buscar la salvación, aunque sea de otra forma, algo de lo que, por ejemplo, el Estudiantes bien puede hablar.
Pero antes de acometer otros ensayos hay que terminar esta campaña, empezando por el duelo de ayer. Un duelo poco vistoso, con poco acierto y muy trabado hasta el final, siguiendo el planteamiento de Lagun Aro GBC, que con las bajas de Woods y Motos, y la precariedad física de Ibekwe -saltó a la cancha en la segunda mitad debido a los problemas de faltas de sus compañeros- y Papamakarios, no podía plantearse un partido a campo abierto. Lo cierto es que el estado físico del Gran Canaria tampoco permitía muchas alegrías; menos aún tras la lesión -la enésima- de Xavi Rey en el tercer período.
«No estábamos preparados para jugar a un marcador muy alto», confesaba Sito Alonso. «Hemos llevado el ritmo que queríamos, pero cuando juegas a un marcador de este tipo, los detalles son súper importantes. Tres o cuatro acciones defensivas mal ejecutadas por nosotros han supuesto varias «puertas atrás» suyas. Y luego, cuando hemos llegado con opciones de partido a los últimos minutos, hemos pecado un poquito de precipitación», reconocía el preparador de Gipuzkoa Basket.
Las faltas -Doblas acabaría eliminado cuando estaba siendo el mejor de su equipo-, sobre todo de los interiores, la ausencia casi total de poderío reboteador y el escaso acierto en el tiro traicionaron a los donostiarras, que a pocos minutos del final aún empataban a 47 de la mano de Finley y Doblas, y que nunca tiraron la toalla, como lo demuestran los puntos finales de Dani Díez cuando el Gran Canaria, que se escapaba merced a los 27 tiros libres de los que disfrutó, decantaba el duelo a su favor.
Orgulloso con el equipo
Resignado, sin duda, pero Sito Alonso no dudaba a la hora de mostrar su orgullo por el comportamiento de sus jugadores, después de haber vivido «la semana más dura de la temporada» por culpa de las lesiones.
«A pesar de todo, estoy muy contento con el trabajo que han realizado muchos jugadores. No es nada fácil jugar este partido y creo que han hecho un esfuerzo muy grande. Por ejemplo, Dani Díez ha hecho un trabajo magnífico; Raúl Neto, pese a su edad... Pero creo que nos ha faltado esa pequeña chispa para tener un poquito más de solvencia en los últimos tiros que nos dieran opción de ganar», dijo.
Extrapolando lo sucedido ayer con toda la campaña, el técnico guipuzcoano explicó sobre la suerte de su equipo que «las cosas no se resuelven el último día, sino trabajando con anterioridad. Para mí es lo más importante». Asimismo, quiso destacar «la simbiosis que ha tenido el equipo con la afición».
Sobre su futuro, Alonso recordó que «yo tengo contrato» y subrayaba que «estoy muy contento de las cosas que he aprendido este año, porque no se me van a olvidar nunca. Porque para nuestra mejora, la de todos, pero la mía el primero, he aprendido muchísimo», aunque reconocía al mismo tiempo que «hay que relativizar las cosas y analizarlo bien todo».