Bea Martxueta, secretaria de Política Social de LAB, encabezó ayer ante la sede de la Seguridad Social en Bilbo una protesta en la que se podía leer «Madrid nos roba nuestra pensiones», que contó con la presencia de jubilados y pensionistas del sindicato.

Explicó a GARA que «todas las reformas y recortes neoliberales que se están aplicando al sistema de pensiones tienen el mismo objetivo: vaciar y cargarse el sistema público de pensiones».

La sindicalista aseguró que el «lobby financiero» quiere hacerse «con el control de las pensiones», pero el sistema público «impide todavía esa transferencia de enormes cantidades económicas al sistema financiero privado». En este sentido, Martxueta matizó que «decimos todavía, porque la reforma que se está cocinando en Madrid, cuyo eje principal es el factor de sostenibilidad, va a cambiar el sistema de raíz. A partir de este momento, sabremos lo que aportamos, pero no sabremos lo que nos corresponderá en el futuro».

Variables económicas

La secretaria de Política Social de LAB explicó que «el sistema se precarizará totalmente al albur de diferentes variables de esperanza de vida, de número de cotizantes o de crecimiento del PIB». Por lo que, a partir de este momento, Martxueta aseguró que «el sistema estará sometido a recortes permanentes» y las consecuencias que acarreará esta situación serán que «las pensiones serán más bajas y que cada vez mayor número de personas se quedará sin pensión». Ante esta situación que empeorará el futuro del bienestar de las personas que se jubilen o accedan a la pensión, la representante de la ejecutiva de LAB denunció ante la sede de la Seguridad Social que el Gobierno español «pone la alfombra roja, tanto a la banca como a las aseguradoras, para elevar su cuota de mercado en la acumulación de recursos y fondos de las personas».

LAB, ante esta sangría a los derechos consolidados, interpeló a Yolanda Barcina y a Iñigo Urkullu para que «actúen con responsabilidad política» y «hagan todo aquello que tengan a su alcance para impedir esta reforma«. A su vez, LAB les exige que avancen en la consecución de «un sistema público vasco de Seguridad Social y protección Social».

La realidad quedó plasmada en la Gran Vía de Bilbo, porque los propios jubilados y pensionistas reconocieron que se están dando pasos «para que nos dejen a nosotros con pensiones cada vez más bajas, por medio de recortes». Pero, a la vez, algunos de los concentrados explicaron que «están trazando un futuro muy negativo para los jóvenes». Por lo que llamaron a defender un sistema público de pensiones, porque seguir por el camino que está marcando el Gobierno del PP supone «un empeoramiento de la protección del sistema de pensiones. Somos personas, las que estamos detrás de esa definición». Pero, además, denunciaron que estas reformas «se nos imponen, mientras se nos niega la capacidad de decidir».