«Recortarán las pensiones para beneficiar al sistema financiero»
El Gobierno español del PP ha decidido acelerar el factor de sostenibilidad para calcular y actualizar las pensiones. Fue el Gobierno de Rodríguez Zapatero quien lo introdujo con apoyo de la patronal y las centrales sindicales CCOO y UGT, pero Mariano Rajoy mete prisa para recortar las pensiones.
Juanjo BASTERRA | BILBO
¿Qué significará la aplicación del factor de sostenibiliad en las pensiones ?
Se avecina un nuevo recorte de las pensiones por distintas vías. Primero, porque las personas que acceden a una pensión, ésta va a ser más baja. Segundo, la gente que tenga una pensión, su revalorización conllevará la pérdida de poder adquisitivo, incluso se está hablando de la reducción de su cuantía. Y, tercero, se anuncian futuros retrasos de la edad de jubilación más allá de los 67 años. Habrá un recorte de las pensiones profundo, un empobrecimiento y un reparto de la riqueza más injusto y desigual entre la población.
¿Es sostenible el sistema público de pensiones?
Es totalmente sostenible, como cualquier otro servicio público. Nadie se plantea que la Policía tenga que financiarse solo con las multas, por ejemplo, sino que se tiene que financiar con impuestos. Hay que discutir si queremos que la gente que acceda a una pensión tenga un nivel de vida digno. Como se financia: una parte tiene que ser por las cotizaciones, pero no hay que limitarlo ahí. Ese debate no se quiere hacer.
¿Por qué?
Porque en el fondo subyace una política que nos lleva a plantear el nivel de recaudación pública. Existe una presión fiscal baja respecto al nivel medio europeo, y también el gasto en protección social está alejado de la media de la UE. El debate de las pensiones se enmarca dentro de ese modelo de sociedad, que evidentemente ELA reivindica como que debe de haber un aumento de la protección social, incluida las pensiones, y un aumento de la presión fiscal por medio del aumento de la lucha contra el fraude y del incremento de los impuestos a las rentas altas y de capital.
¿Por qué, entonces, las cotizaciones deben ser las que paguen el coste de las pensiones?
Lo acordaron así. Las pensiones se pagan por cotizaciones. Pero tampoco se ha hecho lo contrario: cuando ha habido superávit no se subían las pensiones. Normalmente siempre ha habido superávit, pero nunca se ha dicho que aumenten. Solo se utiliza para reducir. ELA siempre ha rechazado el Pacto de Toledo porque no asumimos que el sistema de pensiones se tenga que financiar con las cotizaciones. Es una decisión política, porque se sabe que en el futuro pasará por recortes. Si cada vez un mayor porcentaje de la población cobrará lo que cotiza, está claro que no hay alternativa más que el recorte.
¿Es un vaso comunicante: si bajan las pensiones públicas, subirán las privadas?
Estas decisiones fomentan el sistema privado de pensiones. Nadie explica cómo es posible que se pueda financiar el sistema privado y no el público. Eso es una construcción ideológica, porque detrás de la misma están los intereses de las entidades financieras privadas, que son las que están haciendo negocio con el futuro de pensiones. No aceptamos que nos aboquen a esta situación a favor de los intereses de unos pocos.
¿ELA defiende un sistema público de pensiones?
Sí, un sistema público de pensiones que garantice un nivel de vida digno a las personas pensionistas. Ese es el debate.
¿Qué piensa de los incentivos fiscales para contratar pensiones privadas o pensiones complementarias como las EPSV?
Siempre hemos defendido que los incentivos fiscales al sistema privado de pensiones nunca pueden ser superiores a los incentivos al sistema público. Hoy hay un sistema privado de pensiones que fiscalmente es tratado mejor que el público. Siempre lo hemos rechazado. Hemos denunciado esa política favorecedora. No es una cuestión fiscal, sino que se debe ver a quién se beneficia, qué colectivos se ven afectados. Porque una cosa es que un trabajador haga una aportación de 100 euros, pero no hablamos de esto, sino de gente que tiene la capacidad de aportar miles de euros, mucho dinero. Cuando se ven los análisis comparados de otros lugares, no se permiten desgravaciones elevadas, como aquí.
¿Un sistema público de pensiones vasco es viable?
Es totalmente viable. Como en cualquier sitio. En ningún lugar se plantea si son viables. La viabilidad de los sistemas de pensiones en general dependen del empleo, las aportaciones y los salarios. No se puede decir que hay que bajar los salarios y luego quejarse de que las aportaciones a la Seguridad Social o al IRPF bajan. Como van a subir si bajas salarios y destruyes empleo. Se hace hincapié en recortar, pero lo que hay que hacer es aumentar los salarios por encima del IPC, crear empleo digno y de calidad. No empleos de 600 euros, sino bien remunerados. Eso garantiza el sistema de pensiones.
¿Qué piensa de que siempre nos traten de comparar con Alemania, también en pensiones?
Los datos que salen sobre Alemania desde una perspectiva social, muestran que es un modelo fracasado. Otra cosa es que a los empresarios les vaya bien y ganen mucho dinero. Hay mucha gente que tiene salarios por debajo del umbral de pobreza; jubilados que siguen trabajando porque sus pensiones están en la pobreza. El factor de sostenibilidad se puso en marcha en Alemania, pero es un desastre. Antes nos dijeron otros modelos a seguir como Irlanda. Van cambiando, para justificar la misma receta.
¿Los pensionistas y jubilados están llamados a la huelga general del próximo 30 de mayo?
Claro, incorporamos la reforma de las pensiones. Cuando se nos plantea la necesidad de la unidad sindical, así lo hacemos. Practicamos la unidad sindical y social. Pero no es compatible ir denunciando ciertas políticas en un ámbito y ser copartícipes de las mismas. Así ocurrió con la reforma pensiones en 2011 que fue firmada CCOO, UGT, la patronal y el Gobierno de Zapatero. Ahora se da la circunstancia de que un miembro de CCOO es copartícipe en la comisión de expertos. No se puede practicar esa hipocresía, porque están dando cobertura y eso supone apoyar un nuevo hachazo a los derechos de mucha gente.
«Los pensionistas y los jubilados están llamados a la huelga general del 30 de mayo. Cuando se nos plantea la necesidad de la unidad sindical, nosotros la practicamos. Pero no es compatible ir denunciando ciertas políticas en un ámbito y ser copartícipes de las mismas, como hacen algunos»