El viernes 24 de mayo el parlamentario de EH Bildu Pello Urizar preguntó al Gobierno de Lakua si pensaba quitar la festividad del 25 de octubre del calendario laboral. El consejero de Empleo, Juan María Aburto, respondió que no lo harían en el 2014 y que no tenían intención de hacerlo tampoco en el futuro. Reprochó al interpelante el haber generado un debate que no es prioritario para la ciudadanía y genera división. Apuntó que podría estudiar la cuestión si se presentaba una alternativa que generara mayor consenso que el 25-0.

A la vista de la respuesta gubernamental, EH Bildu presentó una moción para que el Parlamento instara al Gobierno a retirar la fiesta, proponiendo su sustitución por el 3 de diciembre, Día Internacional del Euskara.

La moción de EH Bildu provocó la inmediata reacción del PNV. Contradiciendo lo dicho por el consejero de Empleo, presentó una proposición de ley para derogar la norma por la que en la pasada legislatura se declaró festivo el llamado «Día de Euskadi».

El Parlamento debatió ayer la moción presentada por EH Bildu. El PNV registró una enmienda para que en lugar de pedir al Gobierno que tomara la iniciativa, lo haga la Cámara a través de la proposición de ley ya registrada. Además, dejaba de lado la presentación de una alternativa, alegando que ya podrá buscarse más adelante.

A la hora de la votación, el PNV se abstuvo en la propuesta original de EH Bildu, que no fue aprobada. Sin embargo, la coalición independentista apoyó la enmienda del PNV, por lo que el Parlamento manifiesta su determinación de proceder a la derogación de la ley que fijó el 25 de octubre como festivo.

El debate

Pello Urizar empleó gran parte de su intervención en hacer un repaso histórico de la minorización que ha sufrido el euskara, que todavía necesita apoyo y, tras recoger testimonios de todos los partidos en defensa de la lengua, propuso que el idioma cuente con una festividad insticionalizada.

Por parte del PNV, Joseba Egibar defendió su posición como una vuelta a la situación anterior a que aprovechando las consecuencias de la ilegalización el PSE y PP «impusieran» la festividad del 25-0.

Las criticas de UPyD, PP y PSE se dirigieron sobre todo al PNV, al que acusaron de hacer seguidismo de EH Bildu. Ven lógico que la coalición independentista quiera eliminar la festividad, pero no que la formación jeltzale lo apoye, dado que todo el poder autonómico deviene de la aprobación del Estatuto.

Como no podía ser de otra forma, todos estos partidos utilizaron el discurso del consejero de Empleo, Juan María Aburto, para fortalecer sus posiciones, llegando a acusar al PNV de haber desautorizado al Gobierno.

EH Bildu criticó que el PNV tenga vértigo a apoyar cualquier cosa que propongan. Por eso presentaron una moción temiendo que si proponían una ley el PNV se opusiera.