Haizea Agiriano, responsable sectorial de LAB, explicó ayer a GARA que el segundo juicio contra la sindicalista despedida de la residencia Sarquavitae «discurrió por los parámetros del anterior que fue declarado nulo».

Las sindicalistas obtuvieron un fuerte apoyo de otras compañeras y delegados de LAB. Según explicó Agiriano, la vista estuvo plagada de consideraciones a la sentencia que declaró nulo el despido de la representante en el comité. Incluso, según indicó, «paró los pies al abogado de la empresa, porque trató de introducir algunos hechos que ya habían sido rechazados». La juez en varias ocasiones advirtió de «mala fe» a su representante legal.

Las dos sindicalistas fueron despedidas en diciembre. En este tiempo han mantenido las protestas ante la residencia Miraflores, donde tenían su centro de trabajo, y en el entorno de Sabin Etxea, puesto que el responsable de la empresa, Iñaki Isasi, es miembro del Bizkai Buru Batzar. Las trabajadoras dejaron claro que «solo buscamos mejores condiciones laborales y de calidad del servicio».