La representación sindical de Iketz -5 delegados de LAB-, en Abadiño, firmó un acuerdo con el nuevo inversor, aunque la compañía se ha transformado profundamente y el empleo pasará de 60 actuales a alrededor de 15.

«La mala gestión que han realizado los socios durante años les ha enriquecido; y ante una situación tan grave como esta, las leyes actuales les han dejado impunes de culpa. Y, como siempre, están siendo los trabajadoras los que están viviendo este verdadero infierno», indica la central.

LAB recalca «el ejemplo de lucha y compromiso de la plantilla». Han conseguido firmar un acuerdo, con vigencia hasta el 2016, que garantiza la garantía de empleo. «No podrá despedir a nadie en los primeros 3 años y, a partir de ese periodo, si alguien fuera despedido tendrán derecho a una compensación económica hasta el décimo año».

El acuerdo firmado garantiza una bolsa de empleo para que puedan entrar en estos cuatro años los que se marchan y se garantiza «un blindaje ante la reforma laboral». LAB , sin embargo, lamenta que en Fundiciones San Eloy, del mismo grupo «no se ha conseguido un acuerdo similar. De 124 trabajadores se quedarán 55».