A estas horas se sabrá el resultado del cuarto partido de la final de la NBA entre San Antonio Spurs y Miami Heat. La franquicia texana partía con 2-1, pero una de sus estrellas, el base Tony Parker, tocada.

En el tercer encuentro el francés debió retirarse a los vestuarios, y aunque volviera a jugar, lo hizo mermado. Parker sufre una «ligera elongación» en los isquiotibiales, aunque ha podido jugar esta madrugada.

En otro orden de cosas, Jason Kidd, recientemente retirado tras 19 años de jugador, será el próximo entrenador de los Brooklyn Nets. Mientras Lionel Hollins abandonaba Memphis y suena para el banquillo de los Clippers.