El día 22 se escenificará en la Plaza del Castillo de Iruñea el muro popular que se construirá en Nafarroa «para decirles a los estados español y francés que la época de detenciones, incomunicación y tortura ha pasado y que si siguen dando pasos en dirección opuesta a la resolución del conflicto se encontrarán de frente con un pueblo digno».

El recurso de la sentencia condenatoria dictada en 2001 por la Audiencia Nacional española contra cinco jóvenes de Iruñerria (Luis Goñi, Xabier Sagardoi, Maider Caminos, Mikel Jiménez y Aritz Azkona) se verá en una vistilla en el Tribunal Supremo el 3 de julio. Se decidirá si se anula o si se ratifica la condena de seis años de cárcel impuesta a cada uno de ellos por su militancia en Segi o en Ekin.

En una comparecencia en la Plaza del Castillo, Caminos y Azkona destacaron que han sido condenados por una ley injusta que ha castigado su militancia política.

«La militancia política ha sido considerada delito y hemos sido cientos los jóvenes encarcelados lejos de nuestros hogares. ¡Pero esto ha acabado! Como ya demostraron en Donostia y Ondarroa, no estamos dispuestos a permitir más detenciones», proclamaron.

«Queremos decirles a los poderes del Estado que ha llegado el momento de dejar sin efecto estas sentencias y que no les queda más remedio que garantizar las libertades ideológicas y políticas», destacaron, antes de señalar que numerosos agentes sociales y políticos han mostrado su apoyo a esta demanda.

Junto a ello, criticaron a quienes «todavía no han movido un solo dedo», a los que acusaron de «cómplices de esta estrategia de sufrimiento y venganza».

«Este juicio es una consecuencia directa del conflicto político que ha vivido Euskal Herria. La sentencia que castiga a jóvenes por hacer política va en contra de la paz y la resolución y sois vosotros los responsables de ello», añadieron. Recordaron que son más de 200 los vascos amenazados con entrar en prisión en los próximos meses.

En Iruñerria llevan semanas organizando asambleas informativas en apoyo a los encausados, y ya han activado una ronda de contactos con agentes políticos, sociales y sindicales.

Trasladan a dos presos

Josune Arriaga fue trasladada ayer de la cárcel de Iruñea a la de Zaballa, según informó Herrira, que ha convocado una concentración hoy al mediodía ante la Delegación del Gobierno español y denunció el riesgo de ser enviada a Topas. Estaba en Iruñea para poder visitar a su madre gravemente enferma.

No es el único caso. Otro preso vasco, en este caso Garikoitz Pascual, será trasladado hoy desde la cárcel de Logroño hasta la de León, según denunciaron sus familiares a GARA. Lamentaron este tipo de acciones, y recordaron que le restan ocho meses para cumplir condena.

Por otra parte, ayer quedó en libertad bajo fianza el donostiarra Asier Coloma, detenido en 2010 por su militancia en Segi.