El «pegamento» ya está listo para impregnar el recorrido sanferminero
Las caídas de toros y corredores suelen resultar espectaculares pero evitar o, al menos, reducir las situaciones de peligro también es uno de los objetivos de quienes organizan los encierros en Iruñea.
GARA | IRUÑEA
El recorrido sanferminero comenzó a prepararse el pasado día 3, cuando se colocaron los primeros tablones del vallado, labor que se inició en el tramo del encierrillo, el que une los corrales de Santo Domingo con los corralillos del Gas, zona esta última que se vio notablemente afectada por la riada del pasado domingo.
El Grupo de Trabajo del Encierro se reunió ayer para, tal como difundió la agencia Efe, abordar diferentes asuntos sobre la coordinación de los encierros tras analizar las carreras del año pasado y repasar las normas de participación de los corredores.
Según informó el Consistorio en un comunicado, tal y como se lleva realizando desde el año 2005, se aplicará una sustancia química antideslizante en la plaza Consistorial, calle Mercaderes y curva de Estafeta por la noche para reducir los resbalones de corredores y toros. Esa impregnación se dará por primera vez el 2 de julio en la curva que da paso de Mercaderes a Estafeta. Su objetivo es reducir las caídas de toros y corredores.
A partir de su contacto con los minerales del suelo, la sustancia que se aplica crea millones de microporos que causan una acción ventosa y evitan muchos resbalones.
Amplio grupo de trabajo
El Grupo de Trabajo del Encierro está presidido por el concejal delegado de Seguridad Ciudadana, Ignacio Polo, y forman parte de él, entre otros, la edil delegada de Participación Ciudadana, Juventud y Deporte, María Caballero, y un representante de cada grupo político municipal.
También integran este órgano representantes de la Casa de Misericordia, Agencia Navarra de Emergencias, Cruz Roja, DYA, servicios sanitarios, Federación de Peñas, Policía Municipal y otros colectivos que participan en el encierro como pastores, ganaderos, dobladores, corredores y carpinteros.
Los encierros del pasado año dejaron cuatro heridos por asta de toro, mientras que 41 personas fueron trasladadas a diferentes centros hospitalarios y fueron necesarias 388 atenciones a heridos de diferente consideración.