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Joseba UGALDE | PRESIDENTE DE LA EMF

«Debemos aportar valor a los clubes y a los federados»

La nueva Junta Directiva de la Euskal Mendizale Federazioa ya ha calentado motores. Joseba Ugalde es la cabeza visible, pero le arropan en su trabajo de presidente Leire Salazar (vicepresidenta), Alex Sota (tesorero) y Esti Kerexeta (secretaria). Se presentan como un equipo de trabajo joven con ganas, entre otros objetivos, de trabajar por un montañismo participativo.

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Andoni ARABAOLAZA

Joseba Ugalde y su equipo ya lleva unos meses al frente de la EMF. En la siguiente entrevista concedida a GARA, el nuevo presidente nos presenta las claves de su proyecto.

Desde la última etapa liderada por Arantxa Jausoro, siguiendo por la de Txomin Uriarte y terminando con la de Alvaro Arregi, la Euskal Mendizale Federazioa ha vivido episodios muy convulsos. Me ha llamado la atención que presentarais una candidatura para tomar el timón de la EMF. ¿Cuáles han sido las razones?

Bien, la primera razón ya la estás enunciando tú. Creíamos que era el momento de presentar una opción que estabilizase la EMF, saliendo de la imagen de confrontación y disputas de los últimos años. En ningún momento pretendemos poner en entredicho lo realizado hasta aquí; pienso que cada presidente ha tenido un contexto determinado y ha actuado en función del mismo. Para mí, en particular, la razón obedecía además al sentimiento de querer aportar algo más personal fruto de la implicación de las personas y de la experiencia acumulada. Es algo conceptual, pero que pienso tiene mucho lugar aquí, en este momento.

Llevas ya unos meses al frente de la federación. ¿Con qué te has encontrado?

Puedo afirmar que tiene unos procesos y procedimientos bien estructurados, con funciones definidas y personas con muchas ganas de trabajar por ella. Una situación financiera saneada, sin grandes problemas a destacar en este sentido. Con una revista fuerte y un equipo de grandes profesionales tras su elaboración.

Resaltaría la importancia que hemos dado al hecho de mantener la sede operativa de Gasteiz y reabrir la sede oficial aquí en Donostia. Con todo lo que ello supone de definir tareas y acotar responsabilidades sobre los procesos clave: federados, área técnico-deportiva, relación con clubes e instancias oficiales, nuevos proyectos y el área de Senderos y Medio Ambiente.

Las últimas asambleas han sido tan tensas que algunos clubes de montaña incluso declinaban estar presentes. El pasado día 15 celebras la primera asamblea de tu mandato. ¿Qué valoración haces de ella?

Reconozco que la imagen que nos llegaba de fuera a los que no participábamos en ellas (hasta la fecha) era cuando menos desoladora, ¡no era la imagen que queríamos de una federación de montaña! Comparto contigo la sensación de algunos clubes de no querer estar presente ante tales situaciones.

El pasado día 15 celebramos la Asamblea Ordinaria para el cierre de 2012 y la aprobación de modificaciones al presupuesto de 2013. En conjunto, participación menor de la esperada, unos 36/37 clubes de los tres territorios, pero tranquila y sin problemas. Nuestra valoración es positiva, creemos estar en sintonía con la preocupación de los clubes acerca de algunos temas cruciales: las actividades de formación, las coberturas de pólizas, las opciones en este sentido y las posibles subvenciones a desarrollar en 2013.

Fundamentalmente nuestra visión es simple: debemos aportar valor a los clubes y a los federados, conseguir una mayor implicación de los mismos y construir hacia un futuro del montañismo vasco. Pienso que estamos en el comienzo de un buen camino, cuando menos no nos hemos equivocado en el comienzo de "la vía"...

Eres montañero, alpinista, escalador, conoces el ochomilismo... es decir, tienes una visión amplia del montañismo. ¿Crees que el hecho de tocar tantas ramas de la montaña te da a la hora de trabajar una visión más amplia?

Buena pregunta. Lo único cierto es que llevo más de 35 años haciendo montaña en distintos ámbitos y con diferente intensidad. Me considero montañero, alpinista ya casi ex y nunca abandonaré el contacto con la misma en cualquier forma. También es verdad que la actividad de formación en la Goi Mendi Eskola me ha aportado una visión distinta de nuestros federados (clientes, no lo olvidemos) y de entender sus preocupaciones y fines.

Si todo esto es una visión más amplia, sí es cierto que me la proporciona, pero todos los miembros de la junta directiva aportan experiencia y conocimientos. En este sentido somos un equipo joven pero experimentado.

Al hilo de la última pregunta, ¿cómo debe ser una federación de montaña en 2013?

Pongamos la federación vasca en 2014, por ser un horizonte realista. Creo que tanto en la gestión como en el área técnico-deportivo debe ser absolutamente profesional. Y por lo  que respecta a nuestras decisiones cada vez estaremos más necesitados de una asesoría amplia en temas medio ambientales, deportivos y legales. Incluso se ha planteado una dirección o gerencia profesional; el tiempo lo dirá. El aspecto promoción del deporte juvenil y la tecnificación serán cuestiones clave para el futuro.

Por lo demás, como visión, que cuente con la coparticipación de los clubes como decisores finales. Además, integradora de actividades diversas, que conjugue la montaña clásica con las nuevas modalidades. Y siempre abierta a lo nuevo. Este es un mensaje de Joan Garrigos (presidente del FEDME) que lo he interiorizado bien.

Cada vez hay más especialidades en este deporte, ¿crees que todas hay que aglutinarlas en el seno de la federación? O, ¿que cada una tenga su propia federación?

«Aprende de la experiencia», es mi lema. Esto me lo contestó Joan Garrigos con claridad. Si ellos no hubieran abierto las puertas a las carreras, al esquí alpinismo y a las competiciones, ahora habría 4 o 5 Federaciones. Cada una encabezando una actividad, y como resultado mucho más débiles (por la representatividad que le otorgan) que la actual FEDME. En Europa ahora se mira con admiración este modelo, frente a la disgregación que está surgiendo. En su momento fue producto de una visión clara: una federación fuerte, abierta a lo nuevo y que integre a las prácticas diversas. Siempre he creído en la importancia de una visión «fuerte», al igual que en las organizaciones, es el primer paso para empezar a construir el futuro.

 También tiene mucha fuerza el mundo de la competición, ¿qué importancia le dais o con qué parámetros vais a trabajar?

La competición es ya una realidad imparable, no debemos ni podemos ir en su contra. Sería absurdo, puesto que el futuro de la mayor parte de las actividades de montaña, esquí alpinismo y escalada está unida a su desarrollo.

Seguimos adelante con los grupos de tecnificación, con el equipo de esquí, de carreras de montaña y de escalada. Los parámetros son simples: dotarles de un apoyo técnico, que cuenten con profesionales senior en su formación, que puedan tener un cierto apoyo de proveedores (ropa y equipo) y que tengan la posibilidad de tomar parte en calendarios estatales e internacionales. Por último, no olvidemos que las actividades subvencionadas en nuestra federación, tanto por el Gobierno Vasco como por la FEDME, lo son precisamente por eso, por ser pruebas de competición.

 Nuestras montañas cada vez sufren más agresiones. ¿El apartado de "medio ambiente" será uno de los pilares más importantes de vuestro trabajo?

La sensibilidad por la montaña es consustancial a nuestra forma de entenderla. Tanto el medio ambiente como las agresiones que éste sufre, son un problema de dimensiones que superan a nuestra acción como federación. No obstante, entendemos que es una función importante a la que deberemos de atender. Si bien es cierto, que tanto la vocalía de senderos como los posibles proyectos que se encaminen, serán una función importante a desarrollar desde aquí, en Donostia.

 En este tiempo que lleváis en la federación, ¿habéis puesto en marcha alguno de los proyectos de vuestro programa?

Bueno, los hemos trabajado, con las limitaciones que teníamos de un cierre tardío de presupuesto de 2012 y la aprobación necesaria de 2013 con las modificaciones que queríamos incorporar. Te puedo mencionar el proyecto de nueva web para la EMF, el proyecto «Mujer y montana» en el que ya estamos trabajando. También añadirte el tiempo transcurrido para hacer operativa esta oficina (como sede oficial). En breve, espero, podamos empezar con el capitulo subvenciones a los clubes, de carácter extraordinario por no haberse convocado en 2012. 

  Claridad, transparencia y trabajo en equipo son los pilares de vuestro programa. ¿Cómo se pone todo eso en práctica? ¿Y a la vez que sea realista?

Son declaraciones fundamentales, no solo conceptuales. Tienen mucho que ver con mi experiencia profesional y mi práctica trabajando con personas y equipos. El trabajo en equipo es la única solución para afrontar un trabajo como éste, que requiere de dedicación y de tiempo compartido para las tareas. No somos profesionales de esto, no hay que olvidarlo, y las decisiones personalistas no tienen lugar en mi agenda. Intentamos poner en conjunto las opiniones, se escuchan y luego se sopesan; no es necesario votar. Claridad y transparencia, es un lema que se practica ya en muchas organizaciones.

 A corto y medio plazo, ¿qué iniciativas vais a promover?

En principio, fomentar la participación y la cercanía con los clubes es casi una obsesión para mí. Intentaremos realizar alguna acción formativa de interés para ellos.

En el capitulo, «Mujer y  montaña» espero poder desarrollar la idea, con un proyecto ya concreto y aprobado acerca de la aportación de mujeres a la historia del montañismo vasco.

También manejamos una idea de interés, que se nos ha propuesto, para la creación de una Fundacion que apoye el Legado Histórico del montanismo vasco. Es una idea impulsada por Antxon Iturriza, de la que espero podamos hablar. Estamos muy necesitados de una aportación cultural en nuestro montañismo; no en vano, es una suma de grandes historias de literatura, viaje y poesía. Además de lo puramente deportivo.


 

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