TRIATLÓN | Dio positivo el 18 de mayo en Bilbo
Berasategi confiesa su dopaje y pide perdón
Cree haber «caído en la peor equivocación» y lo achaca a las lesiones que le han «destrozado» el cuerpo y la exigencia que le ha roto la mente.
EFE | BILBO
La triatleta bilbaina Virginia Berasategi confesó ante los medios de comunicación que se dopó para la disputa del triatlón de Bilbo del pasado 18 de mayo, que ganó, y que hacerlo fue un error por el que pide perdón a todo el mundo. En una comparecencia llevada a cabo en la capital vizcaina y en la que estuvo acompañada por su padre, la triatleta, entre continuos sollozos, leyó un comunicado indicando que «me entristece acabar mi carrera así, pero me alegra haber tomado la decisión de afrontar la realidad de las cosas y contaros la verdad».
Berasategi comenzó su relato confesando que «desde hace más de un año, no estoy bien. Mi cuerpo está destrozado por numerosas lesiones y mi mente rota por los sacrificios y la exigencia que acarrea este deporte». En esa línea, se refirió a los últimos tres años explicando que «han sido un sinvivir pensando en la retirada y en empezar a construir una vida distinta». La vizcaina, que tiene 37 años, admitió que «la realidad es que no sé si estoy preparada para lo que me espera fuera».
Después pasó a confesar su dopaje: «Estoy aquí para dar la cara y pedir perdón. A lo largo de mi trayectoria he pasado centenares de controles y siempre ha quedado claro que he jugado limpio. Ahora, al final de mi carrera, he caído en la peor equivocación en la que puede caer un deportista».
El positivo -por una sustancia que no se ha hecho pública- le fue anunciado el 14 de junio, y la triatleta no va a esperar a los resultados del contraanálisis. «He decidido que no voy a apelar porque sé de mi culpabilidad. Podría haber intentado seguir adelante, buscar causas externas, pero ¿para qué? He decidido afrontar la verdad, porque la vida sigue y quiero seguir siendo sincera y honrada», argumentó sobre la decisión.
«Experiencia terrorífica»
«Intentar demostrar que esto no era cierto hubiera sido una traición a mí misma y a aquellas personas que me quieren. Hubiera sido tapar un error con otro error», señaló la triatleta, reconociendo que durante estos últimos días está viviendo una «experiencia terrorífica» y que ha preferido dejar pasar unas jornadas antes de comparecer ante los medios y poder encontrarse un poco mejor.
Berasategi dejó claro que «todas las observaciones, todos los comentarios, todas las críticas que se puedan hacer sobre el positivo, me las he hecho yo misma», para a continuación pedir «perdón a toda la gente» a la que ha «defraudado» con el positivo, «especialmente a aquellas personas que siempre han creído en mí, a mis patrocinadores, a las instituciones, a todos los triatletas, aficionados y profesionales».
También a su familia, tal y como dejó entrever al reiterar que «sé que mi acto de debilidad ha sido muy grande, pero me reconforta pensar que hay mucha gente que a pesar de la acción que he realizado, cuya primera víctima soy, me perdona». Por ello, Berasategi terminó su comparecencia y su despedida expresando sus «más sinceras disculpas» y su «más sincero agradecimiento a todo el mundo», a todos los que la han «acompañado en este largo recorrido» de su vida deportiva.
Berasategi, nacida en Bilbo en 1975, fue campeona del mundo de triatlón de larga distancia en 2003 y había anunciado el 4 de abril que esta sería su última temporada. En su comparecencia, estuvo arropada, además de por su padre, por el concejal de Deportes de Bilbo, Sabin Anuzita (PNV), la edil del PP Beatriz Marcos, o el exjugador de baloncesto Xavier Jon Davalillo.