El portavoz del Sindicato Andaluz de Trabajadores (SAT), Diego Cañamero, quedó ayer en libertad tras negarse a declarar ante el Tribunal Superior de Justicia de Andalucía, en Granada, a donde fue trasladado por la Guardia Civil como imputado por la ocupación de la finca militar de Las Turquillas el pasado verano. Cañamero fue detenido el martes cuando salía de la sede sindical de El Coronil.

«Que nadie se tome esta actitud mía como una falta de respeto hacia el juez. Es una protesta pacífica ante la mayor campaña de criminalización que se ha hecho en la historia contra el sindicalismo andaluz de clase. El SAT decidió en su día que nos declaráramos insumisos judiciales no por capricho, sino para protestar contra la represión. Por eso permanecemos mudos ante los jueces», declaró a su salida del juzgado. Reiteró que seguirá en esta «actitud pacífica de no colaboración con la represión» y advirtió de que «no podrán con el sindicato, ni con la lucha del pueblo».

Amaiur expresó su solidaridad con Cañamero al tiempo que denunció «la política de represión y criminalización social contra este sindicato y, en general, contra la población jornalera y trabajadora andaluza en lucha por sus derechos».