Virenque: «podíamos haber vuelto a empezar en 1998 con un nuevo ciclismo»
Richard Virenque asumió el papel de villano del Tour de 1998 al tener que abandonar como todo el Festina tras la detención de un masajista del equipo con EPO. Quince años después mantiene su carisma pese a ese caso y lamenta que entonces se vendiera que solo un equipo tenía un problema y no se quisiera recomenzar el nuevo ciclismo.
Joseba ITURRIA
A falta de un corredor francés, al margen del los especiales Thomas Voeckler y Pierre Rolland, que consiga ganarse el corazón de sus aficionados, Richard Virenque mantiene el carisma entre su gente, que hace cola en el stand que la cadena de supermercados Carrefour, patrocinador del maillot de la montaña, tiene en el Village Depart en cada salida de etapa para conseguir un autógrafo y una fotografía del último francés en subir a un podio del Tour.... en 1997.
Cuando GARA le solicita una entrevista entre autógrafo y fotografía nos pide que sean solo tres preguntas porque el trabajo se le acumula, pero finalmente se encuentra cómodo y no tiene problemas para dedicarnos unos minutos y trasmitir su crítica a los responsables del ciclismo por no haber remediado en 1998 el problema que tenía su deporte con el uso generalizado de la EPO.
Entonces les tocó pagar solo a él y al resto de los compañeros del Festina que fueron expulsados de la carrera tras ser interceptado un masajista con EPO. Quince años después ha visto cómo el corredor con el que compartía el cariño de su afición, Laurent Jalabert, no ha podido comentar el Tour en la televisión francesa porque pocos días antes de su inicio se difundió que una muestra de orina suya de esa edición de 1998 había dado positivo, como todas las analizadas.
Por ello Virenque trasmite a GARA que «quince años después no cambia gran cosa lo que ha salido hace quince días. Debía salir en 1998, pero en ese momento las instancias o el Tour tomaron otras decisiones y ese año solo se hizo pagar al Festina».
Considera que lo que le tocó vivir hace quince años «fue injusto» porque la utilización de EPO estaba generalizada «y todos lo sabían en la época. Pero entonces nadie dijo nada. Que salgan estas historias ocho, diez o quince años después es una pena porque pienso que en 1998 podíamos haber vuelto a empezar con un nuevo ciclismo, tuvimos la oportunidad de hacerlo porque las cartas quedaron boca arriba y todos, los ciclistas, los organizadores y la UCI, podíamos discutir y comenzar de nuevo. Pero había mucha hipocresía en el sistema y muchos dijeron que el ciclismo no tenía un problema, que el problema era nuestro, que solo había un equipo que tenía el problema».
Más positivo se encuentra ante la situación del ciclismo actual. «Pienso que con lo que ha pasado, el ciclismo de hoy es totalmente distinto al de los años 90 o 2000 porque las reglas han cambiado. Los corredores se someten a las reglas para hacer el deporte. Si hay reglas, todos las cumplen. Si no las hay, cada uno hace lo que quiere», destaca Richard Virenque.
Encantado con el cariño de la gente
La gran satisfacción de Virenque es el cariño que los aficionados le demuestran cada día en el Tour a pesar de lo que le tocó vivir hace quince años: «El maillot de la montaña trae muchos recuerdos a la gente y esto me da mucho placer. Han sido casi quince años de ciclista profesional en los que he logrado muchas cosas en el Tour. He ganado muchas etapas, he hecho podios, he ganado la montaña siete veces y eso hace que tenga la simpatía de la gente y es agradable».
Ese carisma que se ha ganado provoca que sea el ex corredor que más trabajo tiene durante el Tour, en el que es la imagen de Carrefour y comentarista televisivo y radiofónico: «Desde hace siete años trabajo con Carrefour y también con Eurosport y Europe 1 para comentar el directo de cada etapa y también con Festina», empresa para la que trabaja después de abandonar su equipo ciclista tras el affaire del Tour en aquel 1998.
Está encantado en su papel de comentarista con el desarrollo de la carrera y se muestra esperanzado con los nueve días que quedan de carrera: «Veo un gran Tour a pesar de que Froome está muy fuerte. Espero que Contador vaya mejor a partir de ahora, igual que Andy Schleck. Quedan seis etapas de montaña y hay muchas cosa que ver. El Tour va a ser magnífico en los Alpes, empezando por el Mont Ventoux».
Carrefour ha elegido a Richard Virenque como imagen del maillot de lunares que patrocina porque ostenta el récord con siete victorias en la clasificación de la montaña que ganó en 1994, 1995, 1996, 1997, 1999, 2003 y 2004, por delante de Bahamontes y Van Impe, que lo ganaron en seis ediciones.
Virenque, nacido el 19 de noviembre de 1969 en Casablanca, (Marruecos) fue profesional entre 1991 y 2004 en RMO (91-92), Festina (93-98), Polti (99-2000), Domo (01-02) y Quick Step (2003-o4). En el Tour ganó siete etapas de montaña en Luz Ardiden (1994), Cauterets (1995), Courchevel (1997), Morzine (2000 y 2003), Mont Ventoux (2002) y Saint-Flour (2004).
Disputó doce Tours, con dos podios en 1996 (3º) y 1997 (2º), tiene cuatro puestos más entre los diez primeros y, al margen de su abandono forzado de 1998 y de la 25º posición de su debut, en todos los demás acabó en el Top 20.
Además corrió un Giro, en el que logró una etapa en 1999, y cinco Vueltas, en las que consiguió como mejor clasificación el quinto puesto en 1995. Además ganó la París Tours (2001). Joseba ITURRIA