Los responsables de Eusko Alkartasuna Unai Ziarreta y Joseba Gezuraga comparecieron ayer en Bilbo para, en nombre de todo el partido, mostrar su apoyo al alcalde de Gernika, José María Gorroño, que ha vuelto a ser imputado por la Audiencia Nacional española por un supuesto delito de «enaltecimiento del terrorismo» por otorgar, el pasado mes de abril, el premio por la Paz y la Convivencia a Arnaldo Otegi junto a Jesús Eguiguren.

Ambos calificaron esta imputación como «una pieza más de la estrategia del Estado contra el camino que Euskal Herria está recorriendo hacia la normalización, la pacificación y la construcción de la convivencia». EA considera que Madrid se ha valido «una vez más» de las asociaciones de víctimas, en este caso de Dignidad y Justicia, «una entidad de dudosa identidad democrática», y de la Audiencia Nacional, «que tan buen servicio presta desde hace décadas contra la normalización en Euskal Herria».

Ziarreta y Gezuraga ensalzaron la labor y la trayectoria del alcalde de Gernika, que calificaron de «intachable» y «reconocida a nivel internacional».

Histórica colaboración

Profundizando en esa argumentación, los portavoces de EA aseguraron que el Estado español «va a hacer una vez más el ridículo en el ámbito internacional», cuando organizaciones de derechos humanos de Europa, «con quienes Gernika y su alcalde mantienen una histórica colaboración», conozcan este procesamiento judicial.

Advirtieron también de la necesidad de «graduar las consecuencias judiciales que generan polémicas absurdas que se crean de manera artificial sobre temas absolutamente asumidos por la sociedad vasca», en alusión al tratamiento dado en algunos medios a los dos temas que han supuesto la imputación de Gorroño, como son reivindicar que se respeten los derechos de las presas y presos vascos, en primera instancia, y el galardón concedido a Otegi y Eguiguren en esta ocasión.

Centrándose en el caso concreto de la imputación por el premio Gernika, estimaron que el reconocimiento al trabajo desarrollado por los líderes políticos premiados «es compartido por la inmensa mayoría de la sociedad». En ese sentido, denunciaron que «una vez más, agentes externos a este país no respetan nuestra opinión, y no solo eso, sino que la criminalizan. Una vez más, el Estado español sabotea el camino que ha emprendido la sociedad vasca».

EA mantiene que la normalización política y la paz «son los mayores retos que tenemos en estos momentos», y por ello el galardón otorgado «a los representantes de dos tradiciones políticas enfrentadas durante muchos años plasma perfectamente estos retos y cómo superarlos».