Rui Costa (Movistar) se llevó su segundo triunfo en el presente Tour, y lo hizo de manera sorprendente para él mismo. «No me encontraba tan bien como esperaba en el inicio, pero sabía que había que meterse en la escapada. No creía que podía ganar la etapa, ni imaginaba repetir», explicó el ciclista luso.

«He esperado a la última subida, era el momento adecuado para atacar. Lo he intentado y ha funcionado», aseguró el corredor de 26 años, quien aseguró que no tiene pensado por el momento cambiar de aires para marcharse a un equipo en el que pueda ser jefe de filas. «Lo veremos más adelante. Por el momento estoy bien en Movistar, hay que esperar al final del Tour para ver qué pasa. Ahora me limito a disfrutar de esta segunda victoria», indicó.

El portugués reconoció que hoy es un día importante para su equipo, que trabajará para tratar de que su compañero colombiano Nairo Quintana pueda mantener su tercera posición en el podio o conquistar la segunda: «Soy su compañero de habitación y sé que está muy tranquilo y motivado. Es un chico muy joven, pero soporta bien la presión en su primer Tour».

Precisamente Nairo Quintana explicó que su equipo no pudo desarrollar los planes previstos en el último puerto de la etapa, el Col de la Croix Fry, porque comenzó a llover y se conformó «al menos con mantener» su plaza en el podio.

«Subimos muy rápido todo el tiempo y no pudimos intentar lo que teníamos pensado porque empezó a llover, y eso templó los ánimos. Mandamos a Alejandro (Valverde) por delante cerca de la cima para tratar de saltar después, pero no tuvimos ocasión para atacar. Al menos terminamos sin percances y mantenemos el podio», señaló el corredor colombiano.

Ante la última opción en la etapa de hoy para tratar de alcanzar la segunda plaza que tiene el español Alberto Contador, Quintana advirtió de los ataques que se pueden producir: «Veremos cómo se desarrolla la etapa porque a veces uno piensa que va a salir de una manera y luego sale de otra. Será difícil mantenerse en el podio y tendremos que estar expectantes ante los ataques de los rivales».

Ante la posibilidad de igualar o superar el tercer puesto de su compatriota Fabio Parra en 1988, Nairo Quintana señaló que «me comprometen, soy joven y tengo que aprender bastante, espero seguir dándole más alegrías a mi país».

Por su parte, Alberto Contador (Saxo) admitió que dio prioridad a lo colectivo que a lo personal: «Mi equipo estaba haciendo un gran trabajo para mantener la general por equipos, hemos podido atacar, Roman (Kreuziger) estaba conmigo. En un momento he querido atacar, pero hemos decidido que era mejor que las cosas se quedaran como estaban».

Para hoy, última oportunidad de asaltar el maillot amarillo, el madrileño señaló que la estrategia «dependerá de las piernas». De hecho, «hoy (ayer) me sentía bien de piernas. Veremos si hay escapada y evaluaremos si podemos ganar o no la etapa», comentó el líder del Saxo.

Por último, el líder de la ronda gala, Chris Froome (Sky), admitió que «fue muy duro al final. Sobre el papel era uno de los días más difíciles que hemos hecho en este Tour, en términos de cantidad de escalada a la que nos enfrentamos. Personalmente, fue un suspiro de alivio, pero siempre fui muy cauteloso, pensando que podían pasar cosas».

Respecto a hoy, admitió que «va a ser una carrera a tope, eso es lo que espero. Solo tenemos que mantenernos, seguir haciendo lo que hemos hecho en este Tour y seguir así hasta mañana (hoy) por la tarde».