Recién llegado y dispuesto a hacerse con la titularidad, pero también a aprender de sus compañeros. Especialmente de su principal competencia para conseguir el puesto de ariete. Kike Sola, recién fichado por el Athletic para las cinco próximas campañas, confía en «aprender muchísimo con Aduriz», con el que «me llevo fenomenal» y al que califica de futbolista con una «grandísima calidad».

El de Cascante sabe que, en principio, parte desde la segunda posición para saltar de inicio en la punta de ataque, pero no por ello renuncia a dar batalla, aunque a veces le pueda la ansiedad, que va con su carácter. «Es normal, llegas a un equipo nuevo y quizás ese ansia te pueda, pero hay que controlarla y para eso está el entrenador y los compañeros», matiza.

Unos compañeros de los que espera ganarse su confianza a base de trabajo diario y buenas actuaciones en partidos oficiales. Para ello, la mejor fórmula es mantener la propia identidad. «Tengo que ser yo, confiar en mí y demostrar poco a poco al grupo que puede confiar en mí», indica el atacante navarro.

Kike Sola está contento con la propuesta futbolística esgrimida por Ernesto Valverde, en lo que se refiere a tener «la iniciativa del juego, tanto en la creación como en la destrucción». «En todo momento la gente se ofrece, no se esconde nadie y todo el mundo se sacrifica para recuperar el balón lo más arriba posible. Intentamos tener mucho la pelota y, a la vez, mucha verticalidad», añade el delantero ribero.

El más importante, el primero

Puestos a señalar encuentros en el próximo calendario liguero, el ariete no oculta que «obviamente» algunos de los más deseados serán aquellos en los que se mida a su exequipo, Osasuna, pero que el más importante en estos momentos es el de Valladolid, donde se estrenarán en competición liguera. Sola recordó que la campaña pasada anotó dos goles en Zorrilla vistiendo la elástica rojilla y que sendas dianas permitieron a la escuadra navarra firmar una meritoria remontada.

Además, el de Cascante apunta que la lucha por hacerse con la punta de ataque no se restringe únicamente a Aduriz y él, ya que pueden entrar en ella futbolistas como Óscar de Marcos, que jugó ahí frente al Hoffenheim a partir del minuto 64 y hasta que se lesionó en el 83. «De Marcos puede jugar en cualquier posición porque tiene condiciones para ello, lo ha demostrado y lo seguirá demostrando. De todos modos, ahora lo más importante es que tenga una buena y rápida recuperación y que esté con nosotros lo antes posible», espera.

Junto a Gorka Iraizoz, el de Guardia -evoluciona favorablemente de su esguince en el tobillo derecho, que le afectó al ligamento lateral externo- fueron los dos únicos futbolistas rojiblancos que entrenaron al margen del grupo en la breve sesión de recuperación que llevó a cabo el Athletic ayer a las 10.30 en las instalaciones de Leogang. Fue un entrenamiento con menos calor que el sufrido en anteriores jornadas -el mercurio solo subió hasta los 18 grados-, pero marcado por una intensa humedad ambiental.