Más próximo en fechas al Tour que nunca, los corredores que mejor terminaron la ronda gala parten como máximos favoritos a imponer su golpe de pedal en una nueva edición de la Clásica de Donostia que se disputa hoy sobre 232 kilómetros. Eso sí, pese a su nueva ubicación en el calendario, la prueba mantiene el recorrido de las últimas ediciones, con lo que las dos ascensiones a Jaizkibel, especialmente la segunda, a 36 kilómetros de la meta en el Boulevard, se presenta como el punto clave de una gran jornada de ciclismo por toda Gipuzkoa.

Apenas seis días después de su finalización, el Tour es una de las principales referencias que se pueden tomar de cara a hacer pronósticos para esta tarde y no cabe duda de que Movistar fue el equipo que mejor terminó la ronda francesa. No estará en las carreteras guipuzcoanas Rui Costa, vencedor de dos de las mejores etapas del pasado Tour, pero por contra José Luis Arrieta presenta un equipo potente con Nairo Quintana y Alejandro Valverde, vencedor de la prueba en 2008 como principales bazas.

El colombiano, que además de la etapa, se aseguró el segundo lugar del podio y el maillot blanco en Semmoz hace siete días, está siendo la verdadera revelación de la temporada y cuenta con las dos ascensiones a Jaizkibel -Arkale va mejor a otro tipo de escaladores- como su principal arma, aunque los 36 killómetros finales pueden perjudicarle un poco. La punta de velocidad del murciano Valverde es otra opción tan válida como la del colombiano para el equipo navarro.

Sin Purito

Sin Joaquim Rodríguez, que ha preferido tomarse unos días de descanso para preparar su presencia en la Vuelta, Richie Porte puede ser otro corredor que se las verá con los de Movistar. El australiano, el corredor más laureado de los que tomarán la salida hoy a las 11 de la mañana, correrá sin la presión de tener que trabajar con Froome y puede reeditar el precioso mano a mano protagonizado contra Quintana en la última edición de la Euskal Herriko Itzulia.

Pero el abanico de aspirantes en esta prueba del Pro Tour es muy extenso, porque Saxobank, ganador de la general por equipos en el Tour, se presenta con un bloque muy fuerte. Alberto Contador estará en la línea de salida, pero visto lo visto, la principal baza del equipo de Riis parece un Roman Kreuziger que terminó el Tour mejor que el de Pinto y que este año ya destapó sus condiciones como clasicómano con su victoria en la Amstel en abril.

Simon Gerrans, que ya fue el primer líder de la Itzulia tras vencer al sprint a todo un Sagan en Elgoibar, es el jefe de filas de un potente Orica que también ha traído al suizo Albaisini y a Impey, que llegó a ser líder del Tour recién concluido. El siempre batallador Sylvain Chavanel o Philippe Gilbert, ganador en 2011, Mollema, son otros dos nombres a tener muy en cuenta.

Entre los nuestros, un necesitado Euskaltel suma Samuel Sánchez a su base del Tour -Nieve, Antón y Gorka Izagirre-. Haimar Zubeldia es el jefe de filas de Radioshack, mientras que la ilusión de Amets Txurruka seguro que se deja ver.