El obispo emérito de Donostia, Juan María Uriarte, que fue mediador en el frustrado proceso de negociación de 1998, se mostró ayer convencido de que «el camino hacia la paz no tiene vuelta atrás», pero puso en duda que esta fase vaya a dar frutos positivos. En una entrevista a Euskadi Irratia criticó que el Estado «no se mueve» y valoró también que ni la izquierda abertzale ni ETA en concreto dan «todos los pasos suficientes que han de dar».

Así las cosas, se preguntó si este tiempo «se nos va a echar a perder», aunque cree que «aún no» y matiza que tiene esperanza de que llegarán «otros tiempos».

Más optimista se muestra Uriarte a medio-largo plazo. «En mi opinión, este camino hacia la paz no tiene vuelta atrás», asevera el obispo emérito de Donostia