Un hombre de 54 años, que responde a la iniciales de J.R.A.Y y que fue trabajador de la Compagnie Internationale des Wagon Lits en Irun, falleció en la madrugada de ayer como consecuencia de su exposición al amianto.

Según informó en un comunicado, el responsable de Salud Laboral de CCOO-Euskadi, Alfonso Ríos, el extrabajador fallecido estaba afectado por «un mesotelioma maligno que se le había diagnosticado en enero de este mismo año y que se deriva del contacto con el amianto en su puesto de trabajo». Ríos explicó que este operario era fontanero y realizaba diversas tareas en la parte superior de los vagones de tren, «lugar en el que había gran presencia de amianto».

Además, afirmó que «no es el primer trabajador de esta empresa que fallece como consecuencia de haber trabajado con este material». Este sindicato recordó que Osalan emitió un informe favorable que relacionaba la patología del trabajador con la exposición a amianto en el puesto de trabajo.

Posteriormente, el Instituto Nacional de la Seguridad Social le reconoció la prestación por incapacidad permanente absoluta por enfermedad profesional. El responsable sindical de CCOO apuntó que «el recargo de prestaciones y la demanda por daños y perjuicios contra la empresa aún se encuentran en trámite a día de hoy».

Finalmente, Ríos insistió en que las víctimas del amianto «pasan por dos auténticos infiernos, uno el que es provocado por las propias patologías derivadas del amianto y sus síntomas, y otro el que provocan las mutuas y las empresas no reconociendo los males como de origen profesional y pleiteando para evitar su reconocimiento».