Un grupo yihadista aseguró ayer que un avión no tripulado israelí fue el que mató el viernes a cuatro de sus combatientes en el Sinaí aunque medios oficiales egipcios aseguraron que fue un ataque del Ejército egipcio.

Ansar Beit al Maqdess, grupo afín a Al Qaeda y que reivindica regularmente ataques contra Israel, aseguró en un foro yihadista que «el ataque israelí» fue preparado «en coordinación con el Ejército egipcio», y anunció que aumentará su campaña de lanzamiento de cohetes. «¿Como puede el Ejército egipcio permitir que aviones sin piloto de los sionistas pasen a territorio egipcio?», denunció.

En cambio, el diario oficial egipcio Al Ahram y la agencia Mena afirmaron que un avión del Ejército bombardeó a los combatientes islamistas que se disponían a disparar contra Israel, no lejos de la frontera.

«No hay la menor traza de verdad en lo que se refiere a ataques israelíes en el interior del territorio egipcio, y las afirmaciones sobre una coordinación entre egipcios e israelíes en este asunto carecen absolutamente de fundamento», afirmó el coronel Ahmed Aly, portavoz del Ejército egipcio.

Ayer por la mañana decenas de personas participaron en un convoy de vehículos que transportaban los restos de los cuatro islamistas muertos. Con banderas negras símbolo de la yihad y lemas contra Israel, recorrieron las calles de Rafah, la ciudad egipcia fronteriza con la Franja de Gaza y, más al sur, las de Al Masura y Al Gora, cerca de la frontera israelí, según autoridades locales.

El convoy pasó sin problemas por un puesto de control del Ejército. En un comunicado, Ansar Beit al Maqdess señaló que los combatientes eran miembros de tribus locales.