Un nuevo anuncio de expansión de la colonización israelí precede al diálogo
El anuncio de la ampliación de las colonias israelíes en territorio palestino ocupado de Jerusalén Este y Cisjordania, que los palestinos condenan y la llamada comunidad internacional se limita a considerar poco oportuno, ha eclipsado la decisión del Gobierno de Benjamin Netanyahu de liberar a 26 prisioneros palestinos, que se hizo efectiva a medianoche de ayer, en la víspera de la reanudación del diálogo entre Israel y la Autoridad Palestina.
GARA |
El Gobierno de Israel y la Autoridad Palestina (ANP) tienen previsto regresar hoy en Jerusalén a la mesa de diálogo que pretende ser el reinicio formal del proceso que ponga fin al conflicto en Oriente Próximo, y lo harán después de que el Ejecutivo que lidera Benjamin Netanyahu excarcelara a 26 palestinos y después de los nuevos anuncios de ampliación de las colonias judías en territorio ocupado. A medianoche de ayer, los 26 prisioneros dejaron la cárcel de Ayalón camino de Gaza y de Cisjordania.
El ambiente previo a la reunión, que pende de un hilo, y a la liberación de los presos se vio enrarecido por el anuncio, el domingo, de licitaciones para la edificación de 1.200 viviendas en Jerusalén Este y Cisjordania y la aprobación, revelada ayer, de otro proyecto para construir 942 casas en el barrio de Gilo, una colonia judía al sur de la Jerusalén ocupada en 1967, que está previsto se expanda por el sur en dirección a los municipios palestinos de Beit Yala y Cremisán, en el distrito cisjordano de Belén. Este último plan fue aprobado hace un año y los últimos trámites previos a la licitación de las parcelas se completaron el lunes.
«Todos estos anuncios de planes aprobados hace tiempo, tienen el único objetivo de perturbar las conversaciones precisa mente en estos momentos delicados», indicó a Efe el concejal jerosolimitano Pepe Alalu, del partido pacifista Meretz.
Estos anuncios de expansión de la colonización han enfurecido a los palestinos, que acusan a Israel de sabotear el diálogo antes de empezar, pero una vez más no ha logrado hacer reaccionar a la comunidad internacional, que se ha limitado a repetir sus palabras huecas de anteriores ocasiones.
Sabotaje deliberado
«Está claro que el Gobierno israelí intenta sabotear deliberadamente los esfuerzos de EEUU y la comunidad internacional para reanudar las negociaciones aprobando más colonias», lamentó el negociador palestino Mohamed Shtaye.
Según medios israelíes, estos anuncios son una manera de apaciguar los ánimos de los sectores más ultraderechistas del Ejecutivo de Netanyahu, contrarios a la excarcelación, en cuatro fases, de 103 presos palestinos encarcelados antes de los Acuerdos de Oslo de 1993. El Tribunal Supremo de Israel rechazó ayer el recurso de la asociación de víctimas Almagor contra su liberación.
El secretario de Estado de EEUU, John Kerry, descartó el lunes en Bogotá que los anuncios de nuevas colonias sean un «contratiempo» y precisó que eran «esperados en cierta medida» y que los palestinos «ya lo sabían».
Kerry instó a «todas las partes a que no reaccionen y no hagan provocaciones de manera adversa» y se contentó con señalar que Washington, impulsor de esta nueva fase de diálogo, considera «todos los asentamientos ilegítimos» y con manifestar su confianza en que la ampliación de las colonias no supondrá un «obstáculo insalvable» para el diálogo.
La Unión Europea (UE) exhortó a israelíes y palestinos a «abstenerse de cualquier acción que pudiera hacer descarrilar (las conversaciones)», en palabras de Michael Mann, portavoz de la responsable de la diplomacia comunitaria, Catherine Ashton. Y también se limitó a señalar que las colonias en Cisjordania, según el derecho internacional, son «ilegales» y podrían «hacer imposible la solución de los dos estados.
En el mismo sentido se posicionó la ONU al recordar la «ilegalidad» de las colonias, mientras que Rusia estimó «contraproducentes» estos anuncios israelíes.
Pero Israel no tiene intención de ceder. «Las construcciones decididas en Jerusalén y en las colonias están en terreno que seguirá siendo israelí», indicó Mark Regev, portavoz de Netanyahu.
Por su parte, el primer ministro israelí criticó las directrices europeas publicadas en julio, que disponen que a partir de 2014 todos los acuerdos con Israel sobre ayudas de la UE deberán especificar que no serán aplicados en territorios palestinos ocupados después de 1967.
«Ellos (la UE) han socavado la paz» en la medida en que «ellos han endurecido las posiciones palestinas», apostilló.
Diálogo «inútil»
El movimiento islamista Hamas, que gobierna en la Franja de Gaza, reiteró el lunes su rechazo a «estas negociaciones inútiles que consideramos un medio para que el ocupante (Israel) tenga una buena imagen en la escena internacional».
Mahmud A Zahar, destacado dirigente de Hamas en Gaza, manifestó que el presidente de la ANP, Mahmud Abbas, no tiene legitimidad para negociar con Israel y «ha ignorado a los poderes y facciones políticas», y estimó que la reanudación del diálogo «contradice el consenso nacional palestino».
El presidente de la Autoridad Palestina (ANP), Mahmud Abbas, pidió ayer al académico Rami Hamdallah que forme un nuevo Gobierno en Cisjordania, dos meses después de que dimitiera como primer ministro por desavenencias sobre sus atribuciones tras la imposición de dos viceprimeros ministros.