Como si de un cara o cruz se tratase, Kaiku y Urdaibai protagonizaron el largo más emocionante de la temporada en los metros finales de la segunda jornada de la XXXVI Ikurrina de Zarautz. La «Bizkaitarra» obtenía una buena renta el sábado, y aprovechaba los largos de ida para sacar ventaja a sus adversarios -los famosos vatios de potencia que manejan los pupilos de José Luis Korta-. Al final, la «Bou Bizkaia» remontó y batió a Kaiku, pero sin poder llevarse la ikurrina, ya que solo le sacaron dos centésimas al bote de Sestao, cuando esta llevaba una renta de más de seis segundos. En todo caso, la empopada final de la «Bou Bizkaia» fue un aviso bien claro para el indiscutible líder de la Liga San Miguel.

La competición de la regularidad parece decantada -otra vez-, toda vez que Kaiku aventaja en ocho puntos a Orio y en nueve a Urdaibai, pero las regatas de La Concha empiezan a llamar a la puerta, y Kaiku, de la misma forma que se muestra intratable remando de proa, en las empopadas sufre un poco más. Es decir, que en la bahía donostiarra la «Bizkaitarra» bien podría romper la regata en el primer largo, pero quién sabe si sus rivales no se le volverán a echar encima tras la ciaboga.

Y es que Urdaibai le remontó siete segundos a la «Bizkaitarra» en el largo final. «¡Están muertos!», gritaba el patrón de la «Bou Bizkaia», el zarauztarra Gorka Aranberri, en referencia a su némesis, que después de disfrutar de ventajas de hasta tres botes -9 segundos- mediada la regata, vio cómo los de Bermeo se les subían a las barbas.

Naturalmente, Kaiku no estaba muerta, ni de parranda. Asier Zurinaga exigió un poco más a los suyos, y sus muchachos le hicieron caso, aumentando el ritmo a 40 paladas. El problema era que Urdaibai venía lanzada, a un ritmo endiablado y con una remada, según los doctos en la materia, más que correcta, sin precipitarse, mientras que el patrón bermeano, que conocía las aguas de Zarautz como el pasillo de su casa, aprovechaba el escaso oleaje para lanzar su bote en pos de la primera plaza.

Hasta casi el último metro, Kaiku mantuvo la cabeza de la regata, y tuvo que ser la photo finish la que desvelara el nombre del vencedor de esta segunda jornada. Al final, algarabía moderada en Bermeo, y disgusto relativo en Sestao, un disgusto que se borró del todo cuando los patrones Cristian Garma y Asier Zurinaga ondearon la ikurrina de vencedores.

Otras conclusiones

La regata zarauztarra dejó también otras conclusiones. La primera, que Hondarribia definitivamente ha vuelto. Aunque Orio superó a la «Ama Guadalupekoa» en los metros finales, la embarcación hondarribiarra al fin remó con una regularidad que no ha tenido en toda la campaña, y habrá que tener en cuenta a los entrenados por Mikel Orbañanos, sobre todo en las regatas en las que haya cierto oleaje o malas condiciones.

La segunda conclusión fue que el largo final de Orio da miedo. Hondarribia y la «San Nicolás», al igual que Urdaibai, superaron a Kaiku en el último largo, en especial la embarcación de Orio, que salvó los muebles y mantiene un punto de ventaja respecto a la «Bou Bizkaia» en la segunda plaza de la Liga San Miguel. Y es que los de Irakoitz Etxeberria suelen volar después de la última ciaboga, de forma que quien no consiga descolgar a los «aguiluchos» en los tres primeros largos, ya puede afanarse en el sprint, porque de lo contrario se puede encontrar con un disgusto.

Por último, mucho cuidado con Astillero. Ayer bogó en la segunda tanda y ganó por la mano a San Juan, San Pedro y un gris Portugalete, y da la impresión de que, de haber remado en la tanda de honor, habría podido rendir a un nivel aún mejor. Aunque en la clasificación general ocupe la novena posición, su mejoría en el último mes es innegable, siendo de largo el mejor de los representantes cántabros. De cara a la regata clasificatoria de La Concha del próximo día 29, la «San José XII» está adquiriendo muchas papeletas para colarse con solvencia entre los siete mejores tiempos.

Todo lo contrario podría decirse de Tirán. La embarcación galaica se impuso en la primera tanda, pero no logró quitarse de encima a Pedreña en ningún momento y no parece llegar a las fechas más importantes de la campaña en el mejor momento físico. Por detrás, Zumaia estuvo cerca de Pedreña y barrió a una Castreña que ya parece resignado a descender.