El PP rechazó ayer en el Congreso permitir una nueva comparecencia del presidente español, Mariano Rajoy, sobre el «caso Bárcenas», así como adelantar el debate de la comisión de investigación pedida por el PSOE sobre las cuentas del PP. A su juicio, los partidos de la oposición están actuando como «colaboradores necesarios» del que fuera tesorero del PP y ahora hay que dejar trabajar a la Justicia.

Todos los grupos de la oposición coincidieron en reclamar en la Diputación Permanente del Congreso una nueva comparecencia de Rajoy sobre los papeles de su exgerente, pues consideran que las explicaciones que ofreció en el Senado el pasado día 1 han quedado desfasadas con las declaraciones de los secretarios generales del PP ante la Audiencia Nacional. Además de esta iniciativa de Izquierda Plural y Grupo Mixto, se pidió debatir en el Congreso la propuesta del PSOE de crear una comisión de investigación sobre la supuesta contabilidad B del PP, una iniciativa de la que se desmarcaron CiU y PNV.

El vicesecretario de Organización del PP, Carlos Floriano, rechazó todas las peticiones alegando que la comparecencia de Rajoy ya fue suficientemente explicativa.

La portavoz del grupo socialista del Congreso, Soraya Rodríguez, consideró «absolutamente necesaria» la comisión de investigación y anunció que su partido recurrirá al amparo del Constitucional si la Mesa no reconsidera su decisión de «impedir» que interpelen a Rajoy.

Soraya Rodríguez, que intervino en la Diputación Permanente antes del comienzo del debate del orden del día, acusó a la Mesa del Congreso de convertirse en un órgano «censor» después de que rechazara la posibilidad de que el PSOE interpele al jefe del Ejecutivo.

Expresó su «más rotundo» rechazo a la decisión de la Mesa al considerar que no tiene las competencias para adoptar esta medida, puesto que ha valorado «el fondo» de la iniciativa más que la iniciativa en sí.

Según argumentó, el Reglamento no impide, como sostiene la Mesa, las interpelaciones a un presidente del Ejecutivo puesto que es un miembro del Gobierno y, por tanto, susceptible de ser interpelado por la oposición.

Antes de dar cuenta de su posición pidió explicaciones al presidente de la Cámara, Jesús Posada, por la decisión de la Mesa, a lo que éste le respondió que el debate que tuvo lugar ayer por la mañana había sido muy extenso y, por tanto, no era el momento para hacer un resumen de las discusiones.