El presidente colombiano, Juan Manuel Santos, puso como condición la entrega del geólogo canadiense Jernoc Wobert para iniciar un diálogo con la guerrilla del ELN que, según fuentes gubernamentales filtradas por medios colombianos, podría llevarse a cabo en Brasil.

Ayer, tanto el ELN como el Comité Internacional de la Cruz Roja que encabezó la misión humanitaria confirmaron su entrega en el sur del departamento de Bolívar. «El señor Wobert fue entregado por el ELN en una zona rural a una misión humanitaria integrada por los delegados del CICR y, a petición del ELN, por el arzobispo de Cali y el superior de la comunidad jesuita en Colombia», señaló este organismo en un comunicado.

Con este secuestro, la guerrilla quiso denunciar que las empresas extranjeras «ostentan el 99% de los títulos mineros de la Serranía de San Lucas, dejando apenas el 1% para las comunidades locales». En concreto, acusó a la compañía Braewal Mining, en la que Wobert desempeñaba una función de directivo, de conseguir títulos mineros a cambio de sobornos.

En el mensaje entregado ayer a la misión humanitaria, el Comando Central de la guerrilla expresó su deseo de que este «acto humanitario» contribuya a «un sano intercambio y aporte por la paz en Colombia» y sea «el inicio de un diálogo fluido para que los esfuerzos de crear el gran movimiento por la paz de Colombia nos congreguen a todos bajo el mismo cielo».

«Este desenlace exitoso demuestra que son posibles las soluciones negociadas de los conflictos, aun existiendo intereses contrapuestos», remarcó el primer comandante del ELN, Nicolás Rodríguez Bautista.

«Siempre hemos estado dispuestos al diálogo con los gobiernos, dejando claro que este debe ser sin condiciones», añadió. Incidió en que «un auténtico proceso de paz debe recoger los asuntos nodales que aquejan a las grandes mayorías marginadas del poder»

«Igualmente valoramos de mucha importancia el diálogo franco y abierto con todos los sectores del país y de la comunidad internacional, porque la paz en Colombia va mucho más allá de sus fronteras», subrayó. Sobre el papel de las transnacionales, dejó claro que el ELN considera «necesaria la participación extranjera siempre y cuando esté fundamentada en acuerdos de mutuo beneficio que no lesionen el interés nacional. Los recursos naturales de las naciones son un bien común que las sociedades, en particular las grandes mayorías, están en el derecho de decidir qué hacen con ellos y tienen la obligación de evitar que haya apropiamiento por particulares, sean estos nacionales o extranjeros».

En este sentido, rechazó «la locomotora minero energética del Gobierno del presidente Juan Manuel Santos por dejarle más beneficios a los extranjeros que a Colombia y porque arrincona la agricultura y la industria, destrozando el medioambiente y la diversidad».

«Desde hace 20 años hemos planteado la urgencia de un proceso de paz haciendo énfasis en cómo y bajo qué parámetros deben explotarse los recursos naturales porque no compartimos la manera como los sucesivos gobiernos asumen este delicado asunto para beneficio propio y de foráneos», concluyó en un mensaje de vídeo.