El pueblo de Orio espera impaciente a que llegue la segunda jornada de la Bandera de La Concha. Tras dos años de dolorosa ausencia, los aguiluchos han vuelto a la «Olimpiada del remo», cuyo palmarés encabezan con la friolera de 31 entorchados. Y lo han hecho a lo grande, ya que tras la primera regata siguen con opciones de victoria, a 6,12 segundos de Urdaibai y a 2,72 de Hondarribia.

Aunque por historia y tradición el objetivo de los amarillos en Donostia ha sido siempre ganar la bandera, lo conseguido hasta ahora ya se puede considerar todo un éxito, viendo cuál era la situación de la trainera guipuzcoana hace apenas un par de años. Una resurrección en toda regla que se culminará este domingo, ganen o no el trapo más importante del año.

Hundirse... y levantarse

Para comprender el contexto general, cabe recordar que en la clasificatoria celebrada el 1 de setiembre de 2011 Orio se quedaba fuera de La Concha por primera vez en veinte años. Y lo peor de todo era que la noticia quedaba en segundo plano, ya que, a pesar de acabar la Liga San Miguel en última posición, a los amarillos se les presentó la oportunidad de apurar sus opciones de mantenerse en setiembre, disputando el play-off y a la espera de lo que se decidiera sobre el «caso Urdaibai».

Como es sabido, los oriotarras acabaron descendiendo a la ARC-1, y en otoño comenzó a gestarse el proyecto que ha llevado a la trainera hasta donde está en estos momentos. Una nueva directiva liderada por el presidente Ibon Huegun y que suponía aire fresco; un entrenador experimentado como Igor Makazaga y unido al pueblo por sus lazos familiares; y un equipo de campanillas para tratarse de la segunda categoría hicieron posible lo que nadie antes había conseguido, ascender a la ACT ganando todas las regatas disputadas, las doce puntuables de la ARC-1 y las dos jornadas del play-off, en mar y en ría.

La necesidad de volver a la élite restó importancia al hecho de quedarse por segundo año seguido sin entrar en La Concha, más aún teniendo en cuenta que el play-off suele disputarse justo después de la regata donostiarra. Pero este año, y visto el gran comienzo de temporada que ha culminado con tres victorias en Liga y el Campeonato de Gipuzkoa, volver a la bahía los dos primeros domingos de setiembre se convertía en el gran objetivo del club oriotarra.

Ilusión desbordada

Logrado el billete en la clasificatoria con brillantez, la gran regata del primer domingo ha disparado la ilusión entre los aficionados de la localidad costera, que volverán a acudir en masa a la capital guipuzcoana para teñir de amarillo los alrededores del muelle donostiarra.

El propio patrón Irakoitz Etxeberria, que ha vuelto este año al equipo y está siendo una de las claves de la gran temporada de Orio, ilustraba mejor que nadie el sentir de los suyos, cuando el pasado domingo afirmaba nada más salir del agua que «ya estoy deseando que llegue el domingo y volver a luchar a tope».

Último patrón en ganar la Bandera de La Concha con Orio, guiando en 2007 una tripulación preparada por Joxean Olaskoaga «Aizperro», Irakoitz Etxeberria ha cogido el testigo de Aitor Carrillo, y para la segunda jornada confía en que el ganador de tanda se pueda llevar el título: «Más no se puede pedir. Tenemos la bandera a seis segundos. Creo que el ganador de la tanda se la va a llevar».

En el plano institucional, el delegado Iñaki Arostegi afirmaba que «como club estamos encantados: meternos en La Concha, seguir vivos tras la primera jornada... Que todo el pueblo venga a animar a los remeros».