Los partidos norirlandeses inician unas conversaciones «cruciales»
GARA | BELFAST
El Gobierno de Belfast calificó de «cruciales» las conversaciones que iniciaron ayer los principales partidos del norte de Irlanda con el exdiplomático estadounidense Richard Haas, enviado especial de Washington entre 2001 y 2003, para abordar cuestiones que afectan al proceso de paz y rebajar la tensión entre las comunidades republicana y unionista.
En una intervención ante la Asamblea autónoma, el viceministro principal, Martin McGuinness, de Sinn Féin, reiteró la «gran importancia» que tiene para el proceso democrático la resolución de asuntos que dividen profundamente a la sociedad.
Haas cuenta con el apoyo de Gerry Adams, presidente de Sinn Féin, y de Peter Robinson, ministro principal norirlandés y líder del DUP, y ayer indicó que prevé concluir esta nueva ronda de conversaciones en diciembre, cuando se espera que haya sobre la mesa propuestas concretas respecto a temas como el de las banderas, los desfiles y la herencia del conflicto entre republicanos y unionistas en el norte de Irlanda.
A principios de año, la violencia azotó durante varias semanas las calles de Belfast y otras zonas del norte de Irlanda después de que el Ayuntamiento de la capital decidiera ondear la bandera británica solo en días señalados y no a diario.
Aunque la calma regresó tras varias semanas, la tensión resurgió durante el verano, coincidiendo con el comienzo de la temporada de marchas de la lealista Orden de Orange.
Según Haas, esos enfrentamientos son un «indicio o un aviso de que no se pueden dar por sentado los logros alcanzados» desde la firma en 1998 del Acuerdo de Viernes Santo.
«Hay asuntos pendientes y tensiones no resueltas, y creo que los partidos lo reconocen», dijo.
También la Asamblea autónoma se ha visto afectada por el desacuerdo de los políticos respecto a la herencia del pasado, lo que está entorpeciendo la toma de decisiones conjuntas en materia económica o social.