ELA convocó ayer tres jornadas de huelga, los próximos días 22, 23 y 24 de octubre, entre los más de 4.300 trabajadores de las residencias de Bizkaia en demanda del convenio sectorial.

Convocados por el sindicato, mayoritario en el sector vizcaino, las trabajadoras de los centros de atención a la tercera edad de Bizkaia protagonizaron una manifestación en Bilbo en rechazo al «bloqueo» que sufren las negociaciones del convenio provincial tras más de diez meses de conversaciones entre las partes. Desde ELA, criticaron «la insistencia de la patronal en aplicar la última reforma laboral a las condiciones de trabajo del personal que presta sus servicios en las residencias de Bizkaia».

Las convocantes reclaman la firma del IV Convenio de Centros de Tercera Edad de Bizkaia, con garantías de aplicación a los trabajadores afectados y sin que se recoja la reforma laboral del Gobierno español. ELA explicó que «las patronales del sector siguen, tras más de diez meses de reuniones, insistiendo en que las trabajadoras acepten aplicarles la reforma laboral, empeorando el actual texto del convenio, además nos trasladan una plataforma completamente regresiva en contenidos».

Poder adquisitivo

ELA demandó ayer que «se garantice el poder adquisitivo a los trabajadores mediante la aplicación de subidas salariales equivalentes al IPC».

En el trascurso de la protesta las trabajadoras del sector de residencias de Bizkaia aseguraron que los convocantes no pretenden perjudicar a los usuarios de las residencias y a sus familiares y explicaron con rotundidad que no les ha quedado «otra alternativa» que promover movilizaciones para garantizar las condiciones laborales del personal afectado por el convenio.

Las delegadas de ELA en el sector de residencias de Bizkaia afirmaron ayer que tienen claro que no van a permitir que la reforma laboral entre en nuestros centros de trabajo, ni vamos a permitir seguir con nuestras condiciones laborales congeladas a expensas de lo que las patronales decidan».

En este punto, instaron a las patronales del sector y a la Diputación de Bizkaia, «pagadora en gran parte de este servicio», «a que rectifiquen y inicien una vía de negociación real».