La fase de grupos de la Champions League alcanza esta semana la tercera jornada de esta ronda, el ecuador, y aunque pueda parecer temprano, ya puede ir decidiendo los equipos que se clasifiquen para la siguiente fase de la máxima competición continental o, en su caso, ir despertando a los que aún no han salido del letargo.

En ese primer objetivo de superar la fase de grupos, dos encuentros destacan por encima del resto: Arsenal-Dortmund y Milan-Barcelona. En ambos casos, el liderato de sus respectivos grupos está en juego.

Respecto al duelo entre ingleses y germanos, se trata de un choque entre dos contendientes con trayectorias totalmente diferentes. Si los de Arsene Wenger se encuentran en uno de sus mejores momentos desde hace varios años -los gunners son líderes de la Premier League-, el conjunto dirigido por Jürgen Klopp parece estar atravesando un pequeño bache con respecto al excelente nivel demostrado la pasada temporada.

Hace pocas semanas, los dortmuneses perdieron el liderato de la Bundesliga en detrimento del Bayern Munich, aunque llegan a la cita después de vencer por la mínima al Hannover -con una «victoria sucia», como describió el propio Klopp, que deberá cumplir su segundo partido de sanción por su explosión de temperamento en el duelo contra el Nápoles-.

Este hecho ha coincidido con varias ausencias por lesión, aunque parece que la enfermería ha empezado a vaciarse. Reus, Bender y Sahin ya jugaron el pasado fin de semana ante el Hannover y el lateral izquierdo Schmelzer parece que también estará disponible para esta noche.

En el bando opuesto, Wenger, con su tranquilidad habitual, se muestra confiado en que esta temporada su equipo llegue «hasta los cuartos o semifinales». Y no es para menos. El técnico alsaciano cuenta en su plantel con joyas como Özil, Santi Cazorla, Wilshere, Giroud y el donostiarra Mikel Arteta.

Al acecho de ingleses y germanos está el Nápoles. Con un equipo renovado tras las incorporaciones estivales de los exmadridistas Higuaín, Callejón y Albiol, más el guardameta Reina, entre otros, los italianos visitan a un necesitado Marsella con cero puntos en su casillero. Pero las esperanzas de los franceses aún se mantienen, ya que en la campaña 2010-11 lograron enderezar el rumbo después de perder contra Spartak de Moscú (0-1) y Chelsea (0-2).

Milan-Barcelona. En el grupo H ocurre algo parecido al F, ya que los catalanes comandan la tabla seguidos de un Milan en horas bajas -octavos en la Liga italiana, a 13 puntos del líder Roma-. El club rossonero podrá contar finalmente con Mario Balotelli y Ricardo Kaká después de superar sus lesiones. Los azulgranas, por su parte, podrían salir con su once de gala, con Mascherano en lugar de Puyol, que reapareció ante Osasuna después de siete meses.

También a la expectativa estará el Celtic de Glasgow, tercero a tres puntos del Milan, que recibe en Celtic Park al colista Ajax. Una victoria escocesa, sumada a la derrota italiana, dejaría muy abierta la lucha por el segundo puesto que da acceso a octavos -los terceros jugarán los dieciseisavos de la Europa League-.

Schalke-Chelsea. El grupo E podría terminar la jornada con un triple empate en el liderato. El Chelsea de Mourinho quiere seguir la buena racha en Europa a costa de un Schalke que cuenta sus partidos por victorias. Los germanos pueden volver a contar con Hildebrand y Kevin Prince Boateng, pero no con Huntelaar, baja por lesión de rodilla. El Basilea se podría beneficiar de este envite, pero primero tiene que ganar al colista Steaua.