PNV y PP no quieren que se subvencione el autocompostaje en Bizkaia
A.G. | BILBO
Con los votos en contra de PNV y PP, las Juntas Generales de Bizkaia rechazaron ayer una proposición no de norma de EH Bildu para que la Diputación subvencione la adquisición de autocompostadoras y trituradoras en aquellos municipios que no disponen del quinto contenedor.
Las ayudas forales sí existen en aquellas localidades en las que su ayuntamiento ha instalado el contenedor destinado a la materia orgánica cruda. Posteriormente, esos residuos son tratados en la planta de compostaje que la Diputación tiene en el monte Arraitz, en Bilbo.
La propuesta soberanista, tal y como defendió su apoderado Asier Vega, buscaba ampliar las subvenciones a aquellos municipios donde no se ha implantado el contenedor marrón. EH Bildu estima que el criterio de los responsables forales «es excluyente y no tiene en cuenta la realidad de las zona rurales de Bizkaia».
Reducción de gastos
Añadieron que a través de esa fórmula se «reducirían los gastos de gestión y el volumen de los residuos que van a parar a la planta de Arraitz». Desde la coalición argumentaron que existen varios municipios vizcainos que cuentan con la opción de elaborar compost sin tener que contar con ese quinto depósito.
«Cada vez son más los vizcainos y vizcainas que producen compost y lo utilizan directamente en su huerta o jardín, y cada vez -añadieron- son más las personas que cierran el ciclo del tratamiento de la materia orgánica en su localidad, sin costes de transportes».
No piensan lo mismo PNV y PP, que ligan las ayudas al autocompostaje a la implantación del contenedor marrón. El juntero del PP Arturo Aldecoa llegó a decir ayer en la comisión de Agricultura y Medio Ambiente que aceptar la propuesta soberanista sería «incurrir en gastos innecesarios». De la misma opinión son los jeltzales, que insistieron en velar por la «calidad» del compost.