Bilbao Basket tiene un elenco de jugadores curtidos en miles y miles de batallas, pero resulta que a veces parece que les falta algo de experiencia. No es un ataque a Rafa Pueyo, que sabe lo que se trae entre manos, pero es que no consigue que los suyos jueguen los 40 minutos al nivel que requiere una Liga ACB que se conoce durísima. Es paradójico, pero los hombres de negro repiten sus errores cuando sus estrellas destacan por conocer este juego como nadie. Por contra, Gipuzkoa Basket parece haber aprendido de sus errores; ya en el Palau Blaugrana plantearon el partido como más les convenía, mientras que ayer remataron esa travesía de la ansiedad a la seguridad. El convencimiento con el que jugaron sus hombres es fruto de una reflexión que partía de Sito Alonso tras la derrota ante el Joventut. Rafa Pueyo también conseguirá recorrer ese camino; solo es cuestión de tiempo, y de experiencia.