Al menos 50 personas murieron ayer y otras 65 resultaron heridas al explotar un camión cisterna cargado con combustible y alcanzar a un autobús de pasajeros que se encontraba a pocos metros. El camión, cargado con gasolina, que intentaba avanzar por una carretera con pendiente, redujo la velocidad tras ser avisado de un incendio en los bajos. Los vehículos cercanos advirtieron al conductor del camión que perdía combustible y que se había formado fuego bajo la cisterna. Unos segundos después el camión explotó alcanzando a un autobús de pasajeros que se encontraba a unos metros.