GARA > Idatzia > Ekonomia

CRÓNICA Salud laboral

El registro del uso de amianto incluye a 174 empresas vascas

Todavía existen 125 millones de trabajadores en el mundo que están diariamente en contacto con el amianto. Angel Cárcoba, experto en este tema y sindicalista de CCOO, afirmo que en Araba, Bizkaia y Gipuzkoa existen 174 empresas registradas por haber trabajado con ese mineral cancerígeno, que tenían una plantilla de 25.000 trabajadores.

p027_f01.jpg

El grave problema del amianto para la salud no ha finalizado. A juicio de Angel Cárcoba, sindicalista de CCOO y experto europeo en las consecuencias de este mineral cancerígeno, nos encontramos en los prolegómenos de la «verdadera batalla» que se debe producir no sólo por quienes están sufriendo y han sufrido las consecuencias terribles, sino por quienes, quizá sin saberlo, están en la senda de contraer un cáncer después de quince, veinte o más años de haber estado en contacto con esa sustancia en el puesto de trabajo. Cárcoba participó en el encuentro de la Asociación de Víctimas del Amianto de Euskadi (Asviame) este pasado viernes en Bilbo y dejó claro que hay que situar este grave problema en «el campo judicial, en el político, en el mediático y en el social» para conseguir «romper el silencio al que se está sometiendo a este problema que tiene una gravedad terrible».

La experiencia científica reconoce que las fibras de amianto producen cáncer. Sin embargo, el poder de la industria está presionando en todas las áreas para intentar dar marcha atrás a su prohibición. Si hace unas semanas indicábamos que la Comisión Europea ha permitido a la industria del cloro mantener diafragmas fabricados con amianto, el experto internacional en amianto aseguró en Bilbo que en una reciente Conferencia Mundial en contra de ese mineral, que se celebró la pasada semana en Viena, «el lobby industrial liderado por países como Canadá, Estados Unidos, Rusia, China y, entre otros, Brasil organizó un acto paralelo para presionar para que se pueda utilizar un tipo de amianto, el crisolito, en los procesos productivos y quitarlo de la lista de productos minerales prohibidos». Ante esta situación, Angel Cárcoba dejó claro que, «ahora que tanto se habla de recuperar la memoria histórica, nosotros también lo debemos hacer. Recuperar cómo trabajaban nuestros padres y familiares para conocer en qué procesos manejaban amianto o estaban en contacto con el mismo. Muchas empresas van desapareciendo y, por lo tanto, las probabilidades que tenemos de conseguir que los tribunales nos den la razón pasan por ahí».

125 millones

Refiriéndose a un estudio de la Organización Mundial de la Salud (OMS), el responsable de CCOO aseguró que todavía hay 125 millones de trabajadores en el mundo que están en contacto con el amianto durante su jornada laboral. «Ese trabajo reconoce que 100.000 personas mueren al año por cáncer de pleura -uno de los varios que se puede contraer- por haber tenido exposición al amianto».

Este problema es muy grave, porque el 50% de los cánceres profesionales están causados por ese mineral. Los cálculos de este experto indican que entre 1970 y 2000, el Estado español importó 2,8 millones de toneladas de amianto «que se encuentran por todos los sitios». Según relató, la Federación Europea de Fabricantes de Fibrocemento, en la UE existen 70 millones de toneladas fabricadas con amianto que recubren edificios y canalizaciones, entre otros elementos. En ese espacio de treinta años, más de 200.000 trabajadores estuvieron expuestos de forma directa. «Según los registros del Ministerio español de Trabajo de 2007, había 1.760 empresas que utilizaron amianto en sus procesos de fabricación. En el País Vasco -dijo Cárcoba- son 174 empresas y los trabajadores expuestos alcanzan a los 25.000 trabajadores».

En su exposición alertó porque, según dijo en Araba, bizkaia y Gipuzkoa existen 25.000 kilómetros de tuberías fabricadas con fibrocemento que contiene amianto.

Angel Cárcoba lamentó que el Gobierno español no esté actuando con rigurosidad en este tema. En este caso, reconoció que «no se declaran muertes por enfermedad profesional, mientras que la comunidad científica calcula que al año mueren 16.000 persornas por enfermedad profesional».

Criticó que para demostrar ese cáncer profesional por amianto haya que «acudir a los tribunales» y reclamó ante los afectados y sus familiares, igual que ocurre en Europa, que haya ayudas a los afectados mediante un fondo, que se permita la prejubilación de quienes han estado en contacto con el amianto y, sobre todo, exigió una vigilancia exhaustiva de la salud.

Juanjo BASTERRA

Imprimatu 
Gehitu artikuloa: Delicious Zabaldu
Igo