Después de cinco días incomunicado a manos de la Guardia Civil, el ex primer edil de An- doain por EH, Joxean Barandiaran, fue enviado al mediodía a prisión de forma incondicional y sin fianza por Ismael Moreno acusado de un delito de «colaboración con banda armada». Compareció ante el titular del Juzgado Central de Instrucción número 2 de la Audiencia Nacional incomunicado, régimen que le fue levantado nada más llegar a la cárcel de Soto del Real.

Askatasuna informó de que Barandiaran negó todas las acusaciones de «colaboración con ETA» ante Moreno, igual que hizo ante la Guardia Civil. El juez sostiene en su auto que el ex regidor municipal de Andoain mantuvo un encuentro con su convecina Ainhoa Ozaeta y otra persona más -al que Moreno identifica como Xabier López Peña- los días previos de registrarse el operativo policial de Burdeos, que se saldó con el arresto de cuatro ciudadanos vascos: los dos citados, Jon Salaberria e Igor Suberbiola. Todos ellos se encuentran ahora encarcelados en París.

La Fiscalía pedía todavía más

Cumplido de forma íntegra el máximo legal de los cinco días de incomunicación policial, Barandiaran compareció en el Juzgado de Instrucción número 2 a las 10.20, y permaneció ante el juez alrededor de una hora. Incomunicado y, por tanto, sin poder ser asistido por un letrado de su confianza, Joxean Barandiaran negó ante el magistrado todas las acusaciones vertidas en su contra, explicó Askatasuna en una nota de prensa, algo que, según la misma fuente, también hizo durante los interrogatorios de la Guardia Civil.

Tras su paso ante el juez instructor, según informó el organismo antirrepresivo, Barandiaran transmitió a su abogada en los calabozos del tribunal especial que los interrogatorios po-liciales fueron muy largos, de entre cuatro y cinco horas de duración, y que por ello terminó «muy agotado» el periodo de incomunicación. Además, detalló que el andoaindarra trasladó a la abogada que sus captores «no le han pegado».

Durante la vista, el fiscal Juan Moral solicitó contra el ex primer edil prisión incondicional sin opción a fianza bajo la acusación de un delito «pertenencia a banda armada» y, en segundo término, por uno de «colaboración». Finalmente, el juez asumió la petición de «colaboración con ETA» por las mismas acusaciones que defendía el representante fiscal.

El auto de ingreso en prisión emitido por el titular del Juzgado Central de Instrucción número 2 recoge que el ex regidor municipal está acusado de haber mantenido un encuentro con Ozaeta y López Peña en el pueblo francés de Arcachon el pasado 18 de mayo, respondiendo de forma positiva a una cita que le hizo llegar su convecina. Agrega que Barandiaran reconoció que se habría reunido con su antigua compañera de Corporación y que no sabía quién era el hombre que la acompañaba.

Informe sobre «un estado vasco»

La resolución judicial, además de hacer un respaso a las responsabilidades políticas e institucionales que habría ostentado Joxean Barandiaran a lo largo de su vida, también incluye la supuesta finalidad que las FSE otorgan a la citada reunión: una propuesta para la elaboración «de un trabajo a nivel teórico sobre el `sistema político de un estado vasco'». Todo ello es reforzado por el magistrado especial haciendo mención al material que habrían incautado los agentes de la Guardia Civil en la vivienda del vecino de Andoain: un sobre que contenía «un folleto con el anagrama de ETA», un colgante de «Bietan Jarrai» y, entre otros enseres, documentación de la organización juvenil Segi.

Ismael Moreno concluye que existen motivos suficientes «para creer presuntamente responsable criminalmente de dichos delitos al imputado [colaboración con banda armada], pues existen indicios racionales de criminalidad basados en el contenido del atestado policial, vigilancias, seguimientos efectuados, resultado de los registros practicados, citas y contactos mantenidos por José Antonio Barandiaran con miembros de la organización terrorista ETA, medidas de seguridad adoptadas por el mismo y contraseña para llevar a cabo aquélla».

El juez Moreno, en cuyo texto judicial se afirma también que el abogado de oficio que asistió a la comparecencia judicial solicitó «la libertad del detenido en base a las alegaciones que se tienen aquí por reproducidas en aras de la brevedad procesal», rechazó atender la documentación que intentó presentar la abogada Ainhoa Baglietto para que los familiares de Barandiaran pudieran, al menos en los calabozos del tribunal especial, departir con él unos minutos.

De la misma forma que impidió que la abogado vasca ejerciera la defensa jurídica del anterior alcalde de Andoain, tam- bién vetó el acceso de sus familiares y amigos al tribunal especial de Madrid.

Garzón no se queda al margen

Otro juez de la Audiencia Nacional española, concretamente el titular del Juzgado Central de Instrucción número 5, Baltasar Garzón, también se refirió ayer al operativo iniciado el pasado martes en Burdeos y que prosiguió al día siguiente en Andoain y Baiona, donde fue arrestado Fred Fort, que fue imputado por la jueza parisina Laurence Le Vert pero quedó en libertad bajo control judicial.

Garzón relativizó «la buena noticia» de la operación franco-española, recordando que ETA «es un ejemplo de organización terrorista que se ha reconstruido a sí misma en muchas ocasiones». Dicho esto, criticó con dureza las palabras que empleó el ex presidente del PNV Xabier Arzalluz por calificar de «muy grave» el arresto del que fuera uno de los representantes de la organización armada en las fallidas negociaciones con el Ejecutivo español del PSOE, en referencia a López Peña.

«Los atajos no valen. El Estado de Derecho tiene recetas y posibilidades», aseguró el magistrado español, a la vez que manifestaba que «el terrorismo es un delito con características específicas al que se tiene que responder a corto, medio y largo plazo desde la única forma posible: el respeto a las leyes».