La Guardia Civil amaga con cargar contra una concentración pro presos
Seis patrols de la Guardia Civil se personaron el jueves en Berango, reteniendo durante media hora e identificando a todos los participantes de la concentración en favor de los derechos de los presos. Un agente además mostró su porra extensible y amenazó con cargar.GARA | BERANGO
La cita semanal de Berango en favor de los derechos de los presos estuvo este jueves entorpecida por la actuación de la Guardia Civil que identificó a todos sus asistentes, los retuvo durante media hora, y amagaron con embestir con una porra extensible.
Después de retirar los controles que habían instalado en las entradas a la localidad vizcaina, sobre las 20.25 del jueves, seis patrols de los grupos GAR del instituto militar se personaron en el momento en que los concentrados recogían la pancarta y se disponían a abandonar el lugar.
El movimiento pro amnistía precisó que los patrols pararon en mitad de la carretera y que los agentes echaron a correr en dirección a las personas que habían participado en la concentración, identificando uno a uno a los 35 berangarras que estuvieron en la concentración, y reteniéndolos durante media hora. Un agente del instituto militar exhibió en una momento además, una porra extensible y amenazó con golpear a los asistentes.
Campo en huelga de hambre
Las personas retenidas denunciaron la actuación del instituto militar mediante gritos que exigían la «retirada de las fuerzas de ocupación» y tarareando la canción popular «Aupa gizonak» hasta que los agentes abandonaron el municipio, media hora después.
Por otro lado, el preso político donostiarra José Luís Campo inició el jueves una huelga de hambre de carácter indefinido con la exigencia de que se ponga fin a su situación de aislamiento y solicitar, del mismo modo, que le sean devueltas sus pertenencias.
Debido a las inundaciones que tuvieron lugar el miércoles en parte del Estado francés, los presos que se encontraban en la cárcel de Draguignan, entre ellos este donostiarra, tuvieron que ser evacuados y trasladados a otras prisiones francesas. Campo fue llevado a la cárcel de Uzerch, pero debido a la actitud de los carceleros no pudo llevarse nada consigo, por lo que todo lo que tenía sigue estando en su celda de Draguignan.
En esta nueva prisión el donostiarra también es el único preso político vasco, como lo era el cárcel anterior, con objeto de poner fin a este situación de aislamiento y obtener de nuevo sus pertenencias ha emprendido esta huelga de hambre que ha dado a conocer el movimiento pro amnistía.
Movilizaciones
Como cada viernes en Ondarroa se concentraron 262 personas exigiendo el respeto a los derechos de los presos; en Orio 36; en Lizarra 45, al igual que en Getaria; 137 en Lekeitio; 75 en Bergara; 360 en Gasteiz; 53 en Etxarri-Aranatz; 46 en Lizartza; 50 en Berriozar; 200 en Hernani; 185 en Orereta; 25 en Bera; 68 en Lazkao; 24 en Mundaka; 90 en Algorta; 53 en Soraluze; 252 en la capital navarra; 60 en Oñati y Urretxu Zumarraga; 79 en Zornotza; 190 en Donostia; 35 en Amurrio y 40 en Deba. En Zarautz 120 personas denunciaron la retirada de fotos de presos.