Creo que no podemos bajar la guardia ante estos políticos, empresarios y banqueros que nos quieren llevar por el camino de la amargura y el dolor. Años y años trabajando y cotizando a la Seguridad Social y nos dicen que toca ya elevar la edad de jubilación a los 67 años o los 70 años, como habla la Comisión Europea, y aplicar un cálculo para las pensiones que reduzca la cantidad que cada uno de quienes tienen la suerte de trabajar y cotizar percibirán dentro de unos años cuando se jubilen.

No entiendo cómo todavía la sociedad sigue confiando en determinados políticos que se alían con el gran capital y la élite económica para preservar sus negocios. No hacen nada para garantizar una vida digna para aquéllos que cotizarán durante décadas y que después, como está ocurriendo hoy con una parte muy importante de los pensionistas, cobrarán unas míseras pensiones.

Para evitar eso, no se les ocurre otra cosa que invirtamos en las pensiones del futuro. Ya. ¿Cómo? Nos pagan salarios de miseria, nos hacen contratos precarios que impiden una cotización social normalizada y, sin embargo, tienen la cara de proponernos que con nuestros bajos salarios sigamos alimentando a los Botín, González... que cada año ya nos recuerdan que su plan de pensiones ya sobrepasa los 80 millones de euros. Cantidad que para igualarla con un salario medio vasco necesitaríamos vivir 3.200 años.

Los políticos que tenemos a la vista en Euskal Herria y en los estados francés y español no son capaces de parar esa desigualdad tan terrible, pero sí que son capaces de exprimirnos más a nosotros. Es una vergüenza y disfrazan con su lenguaje retórico y lleno de pleitesía la defensa al poder económico, mientras que se olvidan de los más débiles.

Lo que está claro es que el problema de las pensiones no es real. Primero tendrían que generar empleo de calidad, para que aumentaran los cotizantes. Segundo: deberían de modificar la política fiscal, para que esos que ganan tanto paguen más. Con todo ello, tendríamos más recursos económicos para garantizar un sistema público de pensiones digno. Por esta vía no van. Creo que todos deberíamos responderles con fuerza.