La presión sobre Bildu, y en concreto sobre su diputado general de Gipuzkoa, Martin Garitano, cede después de que por un lado izquierda abertzale, EA y Alternatiba hayan salido al paso de la campaña y, por otro, la amenaza de una moción de censura pierda toda credibilidad.

Como cabía esperar después de que renunciara a descabalgar a Bildu tras su claro triunfo en Gipuzkoa, el PNV confirmó ayer que no tiene intención alguna de aprobar una moción de censura en el caso de que fuera presentada. Así lo hizo su diputado Josu Erkoreka.

En realidad, ni siquiera había noticia detrás, porque la moción de censura fue un mero globo sonda lanzado desde Madrid por el presidente del Senado, Javier Rojo, e inflado por medios como ``El País'' y por el rápido apoyo del PP.

Ya el lunes, el consejero de Interior de Lakua, Rodolfo Ares, se distanciaba con mucha claridad de esa posibilidad y aseguraba que lo único que toca ahora es «la exigencia con Bildu», pero sin pasar a mayores.

En declaraciones efectuadas ayer al mismo ``El País'', era José Antonio Pastor, portavoz del PSE en el Parlamento de Gasteiz, el que aclaraba que una moción de censura en Gipuzkoa realmente «no está sobre la mesa».

El lehendakari del Gobierno de Lakua, Patxi López, incidió en esta idea señalando que ni rechaza ni aplaude la moción de censura, pero destacando que la censura a Garitano «no se puede convertir en un problema entre demócratas»

«Qué más quisieran»

Preguntado por la opción de una moción de censura contra Bildu en Gipuzkoa, el portavoz del PNV en el Congreso, Josu Erkoreka, fue taxativo: «¡Qué más quisiera Bildu!», afirmó en Radio Euskadi.

Argumentó Erkoreka que en ese caso Bildu estaría satisfecho de que prosperara «para privarse de esta manera de la responsabilidad de gobernar, que están descubriendo que es mucho más duro de lo que pensaban, y para venderse como víctimas y excluidos».

Al hilo de ello, censuró que las palabras de Rojo «son una pose electoralista, que parece que ahora apuesta por actitudes firmes cuando sabemos que mañana se van a reunir con ellos para hablar de las cosas que les convienen. No estamos por apoyar actitudes electorales del PP o del PSOE», zanjó el jelkide.