Las calles de Iruñea se llenaron nuevamente ayer de reivindicaciones en favor de la ocupación y de denuncias de las continuas actuaciones policiales en contra del movimiento de ocupación de Iruñerria.

Cerca de un millar de vecinos de todo Iruñerria se dieron cita ayer por la tarde en la capital navarra para, atendiendo al llamamiento realizado desde la Asamblea de Represaliados por el Movimiento de Ocupación y la IGA -Iruñerriko Gazte Asanblada-, respaldar, bajo el lema ``Gaztetxetik espetxera. Okupazioa ez da delitua», a las más de 200 personas que han sufrido el «acoso policial» por «defender el derecho a la ocupación» de inmuebles deshabitados.

Apoyo para Xabier Errea

Además de los numerosos jóvenes encausados en relación a actos de ocupación -once todavía permanecen a la espera de sentencia «con posibilidades reales» de acabar encarcelados, según los organizadores del acto-, uno de los nombres que más estuvo en boca de las personas que participaron en el acto fue el de Xabier Errea, joven iruindarra al que han impuesto una pena de 29 meses de cárcel por «atacar supuestamente a un policía municipal» de la capital navarra. Durante la movilización, varios miembros de la IGA repartieron «bonos de ayuda» para tratar de apoyar económicamente al joven frente a la multa impuesta.

Acusación con nombre propio

La manifestación partió a las 17.45 desde la Estación de Autobuses iruindarra. Tras un breve recorrido lleno de colorido -debido a las numerosas banderolas en favor de la ocupación, en oposición al TAV, etcétera, pero también a los disfraces que vestían algunos de los participantes- y consignas en apoyo a la ocupación y en denuncia de los «montajes policiales», finalizó en la Plaza Consistorial.

En el comunicado, los organizadores denunciaron los «ataques policiales» que viene sufriendo Iruñerria en los últimos tiempos y responsabilizaron de ello especialmente al juez del TSJN Fermín Otamendi y al principal mando de la Policía Municipal de Iruñea, Simón Santamaría, quien añadieron, «ha militarizado» dicho cuerpo. Aseguraron que éstos «siempre nos tendrán enfrente».