El magnífico botín con el que saldó el Athletic sus dos visitas consecutivas a Levante y Real quedó en nada la semana pasada, con la derrota ante otro rival directo, el Betis.

En apenas una semana, los rojiblancos pasaron de mirar con optimismo al futuro a ver cómo se les volvían a echar encima los equipos en puestos de descenso.

Tanto que, con Celta y Levante empatados a puntos, incluso empatando hoy podría regresar a los puestos de los que tanto le costó salir. La victoria, aunque suene a tópico, es el único resultado que le vale esta noche a un Athletic que, para cuando comience el encuentro, ya conocerá el resto de resultados. Algo a lo que Mané no concedió ayer la más mínima importancia pero que, sobre todo en caso de victoria de sus perseguidores, puede repercutir en un equipo bilbaino bastante más presionado de lo recomendable.

Los rojiblancos, con todo, prefieren seguir mirando hacia arriba y viajaron a Madrid con la convicción de que pueden pillar a su rival con el pie cambiado. Y es que mientras San Mamés, con una sola victoria, se le sigue resistiendo al equipo, su buen comportamiento general a domicilio y, en particular, su buena racha en los últimos tiempos -tres victorias (Deportivo, Mallorca y Real) y un empate (Levante) en los cuatro últimos desplazamientos- permite al Athletic afrontar el choque con confianza.

Curiosamente, además, el Atlético viene protagonizando esta temporada una trayectoria similar, aunque menos acusada, a la de los bilbainos en este aspecto. Frente a su fiabilidad como visitante, la escuadra colchonera choca con la ansiedad en su estadio, donde ya ha cedido quince puntos esta tempordada y donde sólo ha sido capaz de ganar dos de sus cinco últimos partidos.

Lo cual no puede ocultar, evidentemente, la actual diferencia entre ambos conjuntos, como bien demuestra la clasificación.

Prieto no viajó

El Athletic, además, viajó a Madrid con un hándicap no por habitual menos importante. El de las numerosas bajas que han vuelto a obligar a Mané a tirar del segundo equipo.

Gaizka Bergara, de hecho, podría debutar hoy en la formación titular, ya que Luis Prieto no se recuperó finalmente y el equipo se ha quedado con Josu Sarriegi como único central, ante la ausencia también de Fernando Amorebieta, en su caso por sanción.

La otra posibilidad pasaría por la entrada de Ander Murillo en el centro de la zaga. Pero es probable que el técnico no quiera realizar tantos movimientos, ya que además debería retrasar la posición de Javi Martínez, dando entrada a Joseba Etxeberria, que sí ha superado definitivamente sus problemas físicos.