«Las motivaciones de aquella lucha siguen hoy más vigentes que nunca"

¿En qué situación se encuentran tras la carga de la Ertzaintza y el atestado remitido por la Policía autonómica el año pasado?

Hay abierta una causa contra nosotros por «enaltecimiento del terrorismo» en la Audiencia Nacional. El 20 de noviembre del año pasado estuvimos declarando ante el juez Del Olmo, y salimos de allí bastante esperanzados, porque ni siquiera se había presentado el fiscal. Pero hace unas dos semanas nuestros abogados recibieron la notificación del enjuciamiento. Entonces presentamos un recurso de alzada, pero si éste no prospera seremos juzgados en la Audiencia Nacional. Luego hay otra causa pendiente en los Juzgados de Gasteiz, donde se nos acusa de «atentado contra la autoridad» y «desórdenes públicos», y también se nos ha incoado un expediente sancionador con arreglo a la «Ley Corcuera», que está a la espera del resultado del juicio de Gasteiz.

Como víctimas del 3 de marzo, ¿se hubieran imaginado alguna vez que sucedería algo así?

No nos pasaba por la cabeza, cuando estábamos aquí en el homenaje, que media hora más tarde íbamos a estar apaleados, heridos, y que se iba a remitir un atestado que nos conduciría a la Audiencia Nacional. Y con una versión, como hace 31 años, totalmente mentirosa. Nos ha costado 31 años de lucha y de trabajo dar la vuelta a la versión oficial y sacar a la luz lo que verdaderamente pasó, y ahora vamos a tener que empezar otra vez a luchar para cambiar una nueva versión policial. Entonces era el Gobierno español, y hoy es el Gobierno Vasco, el Departamento de Interior, el que está actuando.

Tiroteados y apalizados hace tres décadas, golpeados y encausados hoy. Parece que la cosa no ha cambiado mucho...

¡Qué va! No han cambiado, creo que siguen un manual de libro. La actuación ha sido la misma, es la misma represión y, como decía el director de la película, las mismas porras con diferentes colores de cascos y uniformes.

Ha citado la película. El aniversario de este año está marcado también por el documental sobre los hechos.

No hay palabras para agradecer lo que han hecho. Lluis Llach, que cuando se entera de los asesinatos de Gasteiz empieza a componer aquel requiem sobrecogedor, y que 31 años después sigue con la misma coherencia política, es de agradecer. Lo mismo sucede con el director, y con el productor, ya que sabemos que es una película que en muchos sitios va a levantar ampollas. Pero tenemos la esperanza de que sirva para abrir conciencias.

Esperan que Mendizorrotza se llene esta noche. ¿Qué sentirán?

Las previsiones son de lleno total. Estar arropados por miles de personas en Mendizorrotza va a ser muy emotivo.

¿Las motivaciones que llevaron a aquella lucha hace tres décadas siguen vigentes?

Más vigentes que nunca. Entonces la situación socioeconómica, laboral, era muy precaria, pero después de haber logrado mejorarlas sustancialmente, ahora estamos en un retroceso socioeconómico, laboral y de precariedad en el trabajo. Y no digamos a nivel político. Hoy vemos que los recortes y la conculcación de derechos y libertades están siendo cada vez más grandes. Habrá que pensar si hay que retomar el espíritu del 3 de marzo para recuperar lo que se está perdiendo.

I. B.