CAI ARAGON 31

Se acabó la andadura europea del Bidasoa Irun. Una mala noticia en principio, aunque con su lado positivo, ya que los de Julián Ruiz podrán centrar ahora todos sus esfuerzos en darle un vuelco a su delicada situación en la competición liguera.

En cualquier caso, no se lo puso nada fácil al CAI Aragón, que ya partía con una ventaja de dos goles del choque de ida. Sólo a falta de seis minutos para el final, los guipuzcoanos bajaron los brazos, fruto del cansancio, lo que provocó que los locales se fueran de cuatro.

Hasta ese momento, el Bidasoa plantó cara e incluso se puso por delante (3-5) igualando la eliminatoria. Pero los aragoneses no estaban dispuestos a perder la oportunidad de entrar en la historia, alcanzando sus primeras semifinales de la Copa EHF, y rápidamente tomaron el mando del envite.

De todas formas, Nenad Biblija -hasta que le partieron la ceja-, Dawid Nilsson y Tioumentsev mantuvieron al conjunto vasco metido en el partido. Todo ello aprovechándose de la floja defensa del CAI Aragón, que permitía muchos huecos para las penetraciones bidasotarras.

Continuas igualadas

Ello permitió que se llegara al empate a 18 dianas en el minuto 38, al que le sucedió una fase marcada por las continuas igualadas en el electrónico. Un periodo en el que Tioumentsev, con cuatro goles, dio muestras de su poder ofensivo, pero que no tuvo continuidad.

Los a la postre vencedores comenzaron a ajustar su entramado defensivo, unido a que en la plantilla amarilla empezó a aflorar la fatiga, lo que trajo consigo que se iniciara una brecha en el marcador de cuatro goles (27-23). A partir de ahí, el intercambio de goles entre ambas escuadras protagonizó los últimos minutos del partido, en un final en el que el Bidasoa, ya sin opción alguna, se dejó llevar por la inercia.