El Ibex pierde un 1,96% en la semana, aunque ayer encadenó la segunda jornada consecutiva al alza, lo que le ha permitido recuperar 375 puntos respecto del miércoles, día en el que se hundió hasta los 13.602 puntos. En esa jornada, el miedo a que se extienda la crisis de las hipotecas de alto riesgo de Estados Unidos causó verdadero pánico. Ayer se apuntó un 0,27%, y el próximo lunes comenzará con 13.977,40 puntos, por lo que pierde un 1,20% en el año. A pesar del avance, la gráfica del Ibex mostró los bandazos propios de una situación de nervios inseparable de las jornadas de vencimiento de opciones y futuros. También abundó en esta línea de incertidumbre el carácter mixto de los datos macroeconómicos de Estados Unidos, donde se publicaron buenas referencias de producción industrial, pero malas en inflación -subió un 0,4% en febrero- y confianza del consumidor de la Universidad de Michigan, que cayó a su nivel más bajo desde setiembre. Al resto de Europa le fue peor, destacándose la caída del 0,14% en París. Los Ìndices de Londres y Francfort restaron menos del 0,10%. En el Ibex, sobresalió la solidez de Repsol (+3,15%) y Telefónica (+1,15%), los únicos pesos pesados que lograron ganancias. También Fadesa (+2,03%) y Acciona (+2,00%) tuvieron un buen día. Los peores balances correspondieron a Altadis (-3,63%), que espera una oferta efectiva de Imperial Tobacco, y Endesa (-1,16%). En el CAC 40, que se deja un 2,88% en el año, el más entonado fue Alstom (+3,58%), en tanto que el sector bancario, con Dexia (-2,10%) a la cabeza, cerró con números rojos.